De acuerdo con el comerciante Miguel P., quien expuso su vida para librar de un delincuente a su hija que la sujetó y le apuntó con un arma de fuego en el interior de la institución el pasado viernes, la gerente Gabriela Guadarrama no pretende contribuir con las autoridades para dar con los responsables del acto delictivo, ya que se niega a proporcionar el video con el cual se apoyarían los autoridades ministeriales para identificar al agresor.
Miguel P. acudió este lunes a hacer efectivo el tercer cheque que tenía que cobrar, y el cual le fue el viernes objetado por parte de la propia gerente, quien le dijo que no lo podía pagar porque estaba manchado por la sangre que fue vertida sobre el documento tras las agresiones del delincuente al cliente.
La víctima del delincuente y su familia acudieron de nuevo a la institución en demanda de que se hiciera efectivo el pago del cheque, tras varias trabas y pretextos de parte de la gerente lograron su cometido, sin dejar de escuchar una serie de pretextos. “Dijo que la Asociación Nacional Bancaria no le permitía pagar el cheque ensangrentado; que al banco lo iba a multar la Asociación”, dijo por su parte Rosario U., quien nuevamente acompañó a su cuñado para reclamar el dinero.
En la visita realizada a la funcionaria bancaria, también le demandaron contribuyera con la copia del video para identificar al agresor, “es que yo no vi nada”, contestó la funcionaria, quien en la fecha de los hechos mostró actitudes que no correspondían al protocolo de atención que se brinda para el cobro de cualquier cheque, además de que realizo llamadas y retrasó la atención a los cuentahabientes agredidos.
“En el video se tiene que ver, si usted estaba viendo o no viendo; nadie del banco me dio auxilio, nadie de afuera me dio auxilio; no es posible que una institución bancaria no cuente con un cuerpo de seguridad”, reclamó a su vez Miguel P., ante la respuesta de Gabriela Guadarrama y la actitud asumida por el personal el día de los hechos.
Durante la conversación con la funcionaria, ésta indicó que no se tomaron medidas de seguridad, pues “el protocolo del banco decía que las puertas no se tenían porqué cerrar, que por protocolo tiene que seguir trabajando el banco”, cuando en el interior del mismo ocurrió un delito.
“De nosotros viven, de nosotros sacan su salario, y creo que merecemos que nos den esa atención”, reclamo Miguel P., ante la actitud de la funcionaria bancaria.
De forma extraoficial se pudo conocer que elementos ministeriales requirieron a la gerente bancaria el video del día y hora de los hechos, y que es necesario para dar continuidad a la investigación e identificar al agresor conforme al expediente PRZ4/188/2014, que se estructuró para aclarar el delito cometido.
