“Algunos integrantes de la junta en lugar de estar a favor del trabajador, están a favor del patrón”, acusó por su parte Karen Aguilar de la Cruz, quien denunció por despido injustificado a las empresas Iusacell y Elektra de Grupo Salinas, desde el año 2012, el expediente estaba dispuesto para dictar laudo, explica, y se “tuvo que pasar un año más para que se turnara a resolver”.
La quejosa asegura que en ese tiempo acudió a la junta todo un año, y sólo decían “que me esperara, porque tenían mucho trabajo”, ante lo cual tuvo que recurrir a un juez Federal para ampararse por la dilación del proceso, que afirmó “la junta no quería resolver”.
“El personal de la junta actuó como pandilla para perjudicarme, la secretaria, Jessica Díaz Baños, el presidente obrero, Jaime Osvaldo Cárdenas Barrera, el presidente patronal, Aracely Cerón Bonilla, el licenciado Alberto Ramos Juárez, sacaron una cantidad de documentos en donde simularon fechas falsas, hasta el presidente del trabajo”, dijo Aguilar de la Cruz.
Agregó que Jaime Osvaldo Cárdenas Barrera se prestó a firmar estos acuerdos y notificaciones que no existieron en las fechas señaladas. “No conforme con eso, por el coraje de no sacar un beneficio económico, sacaron laudo en mi contra… es increíble que los demandados no contestaron, los absolvieron diciendo que no probé mi acción, siendo que ofrecí pruebas”, expresó que “sólo firmaron documentos sin ver a quien afectaban”, además de resolver a favor de la empresa Mister Tennis, siendo que originalmente denunció a otra empresa.
Rosario Blas Nava, quien efectivamente denunció a la empresa Mister Tennis, señaló que “le dieron la resolución al licenciado que teníamos antes, pero él dejó de trabajar para nosotros desde el año pasado y le están notificando con fecha 25 de febrero (2014)”, además “nos apoyamos en ellos para que nos resuelvan y viene conciliación y hace lo que se le da la gana”, pues oportunamente advirtió a la instancia que había cambiado de abogado.
José Alejandro Blas Nava, denunció a la empresa Sigma, tras años de trabajo y haber sido despedido injustificadamente, “como yo no veía nada, lo di de baja y metí a otro licenciado, y ahora la notificación la recibió el abogado anterior, Sigma compró a la Junta, el abogado de ellos cuando venía les decía qué era lo que necesitaban y él se los mandaba por parte de Sigma”.
Mercedes Hernández Pérez desde el 28 de febrero del 2011 denunció por acoso laboral a la Clínica Centro Renal, pues señaló que su patrón, Eduardo González Valadez, la obligaba a realizar actividades no aptas para sus condiciones físicas, “estaba operada de la rodilla, y él me mandaba a bajar material desde el tercer piso”, y comentó que además de denunciar que sólo pretende liquidarla por cierta cantidad de años de servicio de acuerdo con el Seguro Social, siendo que le dio esta prestación cuatro años después de entrar a laborar.
Ante la serie de irregularidades que los afectados encontraron en relación al seguimiento de los expedientes, determinaron que dirigirán esta situación ante el gobernador del Estado, Javier Duarte de Ochoa, con la esperanza de que su situación sea resuelta.
