* En el Puerto Tuxpeño
Por Julia Méndez
Tuxpan, Ver.- Totalmente desamparados se encuentran los habitantes tuxpeños en caso de presentarse un Tsunami, ya que luego del ejercicio de simulacro que instruyera la Organización de las Naciones Unidas para realizarse en las zonas costeras, se detectaron serias carencias e irregularidades para lograr una pronta y segura evacuación.
Basta señalar las malas condiciones en que se encuentran los caminos rurales, la falta de señalamientos de rutas de evacuación, la inexistencia de refugios temporales en zonas altas y una aeropista que carece de la longitud necesaria para recibir aviones de peso, como los famosos “Hércules”, que son los asignados para enviar ayuda humanitaria ante un desastre de esa naturaleza, lo que deja en evidencia que este Puerto no está preparado para una evacuación real y fructuosa ante la presencia de un Tsunami.
Y es que si bien es remota la posibilidad de que en esta zona costera pudiera presentarse un Tsunami, de darse el caso, serían incontables los obstáculos que limitarían las acciones de rescate.
Tan solo, al existir un solo puente como vía de acceso hacia el municipio más cercano que sería Poza Rica o Tihuatlán, y carreteras en malas condiciones hacia Cerro Azul o Naranjos, no hay duda de que las vías de comunicación colapsarían e incluso algunos tramos quedarían inhabilitados y esta ciudad podría quedar incomunicada, por lo que sería difícil recibir ayuda inmediata.
Y por si fuera poco, hay que agregar que ningún hospital de los instalados en la región cuenta con la infraestructura necesaria para atender a los ciudadanos en un desastre de esta naturaleza.
Esta evaluación deberá ser tomada en cuenta por las autoridades competentes, quienes además deberán considerar la difícil tarea de ampliar el aeródromo debido a los asentamientos humanos que se encuentran cerca del mismo, por lo que la vía más cercana para aterrizar algún avión sería en el aeropuerto Tajín, lo que haría más tardada la respuesta y ayuda.
Pese a todo ello, este simulacro permitió a las corporaciones de auxilio y seguridad analizar sus planes de respuesta, detectando que se cuenta con suficiente personal humano y vehículos para traslado, atención y evacuación, además de la disponibilidad que hay por parte de las diferentes dependencias como la Secretaría de Marina, la Primera Región Naval, Capitanía de Puerto, Protección Civil, y demás autoridades marítimas y cuerpos de emergencia que actuarían de inmediato para despejar playas, ríos y cualquier zona de riesgo.
