Lo anterior se dio al filo de las 9:00 horas, cuando Rosa Isela Solano Pérez, de 30 años, se desplazaba en un vehículo marca Pontiac tipo G3, color rojo, por la avenida Miguel Ángel de Quevedo en dirección al norte de la ciudad, pues se dirigía a su centro de trabajo.
Al momento del llegar a la esquina de la calle Francisco Canal, un automóvil marca Nissan tipo Tiida, color arena, avanzó sin precaución y la impactó por el costado izquierdo, para después quedar contra la guarnición de la banqueta, al tiempo que el presunto responsable quedó en dirección opuesta.
A consecuencia de la colisión, Isela Solano resultó con heridas en cuello y piernas, y solicitó ser auxiliada por los Paramédicos de la Cruz Roja, quienes llegaron en la ambulancia 607. Los socorristas valoraron a la mujer en el interior de la unidad y tras varios minutos de revisión, determinaron dejarla en el punto a petición de ella misma.
Rafael Soto Alfaro explicó a los oficiales de vialidad que conducía sobre la calle Francisco Canal hacía en centro de la ciudad para realizar algunas diligencias. Agregó que al llegar a la avenida, pasó con normalidad el carril de norte a sur y se detuvo junto al camellón.
Pero al tratar de avanzar un vehículo de mayores dimensiones le obstruyó la visibilidad y aceleró pensando que ya no circulaban más autos, dándose en accidente. Incluso, en todo momento, el hombre reconoció la culpa y se comprometió a hacerse cargo de los gastos médicos y materiales.
Al final, ambos conductores fueron trasladados a las oficinas de la delegación para resolver su situación jurídica con la oportunidad de llegar a un acuerdo, de no ser así serían turnados al Ministerio Público (MP) donde deslindarían sus responsabilidades.