Hilario Barcelata Chávez
La economía veracruzana sigue en retroceso. Durante el primer semestre de 2014, el Producto Interno Bruto Estatal (PIBE) cayó -0.4%. Esta situación es resultado de la pronunciada desaceleración económica que vive el estado, que ya puede considerarse prácticamente una recesión al registrarse una contracción económica durante tres trimestres consecutivos: en el último trimestre de 2013 una caída del -1.7, en el primero de 2014 una reducción de -0.5 y en el segundo de -0,4%.
Esto coloca a Veracruz en el lugar 28º entre los estados de menor crecimiento económico con una de las mayores caídas observadas en todo el país. Muy lejos del comportamiento positivo que han tenido otras entidades como es el caso de Aguascalientes que creció 9.2%, Zacatecas 5.9, Guanajuato 5.3, Michoacán 4.8 y Querétaro 4.7%.
Este derrumbe económico es resultado de la profunda crisis que atraviesa la industria veracruzana la cual sufrió una contracción del -2.6% durante el primer semestre de este año, aunque este sector entró en recesión desde el último trimestre de 2012 en que decreció -1.7% para luego de presentar fuertes contracciones consecutivas durante 2013 y lo que va de 2014.
Este comportamiento de la industria en Veracruz representa una de las mayores caídas de la producción observadas a nivel nacional, por lo que el estado se ubica en el lugar 25º, lejos, muy lejos del crecimiento que tuvo Aguascalientes de 17.9%, Michoacán 11.4, Chiapas 11, Zacatecas 10.2, y Guanajuato 9.9%.
Pero también las actividades primarias han contribuido de manera importante al derrumbe de la economía estatal. En primer semestre de este año sufrieron una contracción del -3.2%, también de las mayores caídas observadas a nivel nacional, situando a Veracruz en el lugar 28º, a gran distancia de los resultados obtenidos por el Distrito Federal donde se registró un crecimiento de 26.3%, el estado de México de 18%, Tlaxcala 17.3 y Zacatecas 13.2%.
Las actividades del sector servicios también mostraron una dinámica muy débil, aunque alcanzaron a crecer 1.6% en el mismo período. Aun así, Veracruz fue de los estados de peor comportamiento, pues ocupa el lugar 20º a nivel nacional, contrastando con lo observado en Baja California Sur, donde estas actividades crecieron 3.8%, Hidalgo y el estado de México 3.5% respectivamente y Querétaro 3.4%.
En un balance del comportamiento de la economía estatal de los últimos cuatro años, se observa que el PIBE veracruzano creció apenas 7.3%, lo cual es significa una mediocre tasa de crecimiento del 1.8% promedio anual. Esto coloca a Veracruz entre los estados de menor crecimiento económico, lejos de Aguascalientes que creció 21.3%, Querétaro 18.2, Sonora 18, Coahuila 17.5%, Quintana Roo 17.1 y Guanajuato 16.7%.
Esta situación puede empeorar aún más. Los precios y las ventas de petróleo a nivel internacional van a la baja, y eso afecta considerablemente la dinámica productiva del estado toda vez que la economía veracruzana está altamente petrolizada pues el alrededor del 51.2% del PIBE se genera en la industria petrolera, en donde se realiza el 49% del total de la inversión productiva estatal.
Como la crisis petrolera se extenderá a lo largo del próximo año, es muy probable que Veracruz pague las consecuencias de su escasa diversificación productiva y su pobre desarrollo industrial con un profundo derrumbe económico y social. [email protected]