- 60 mil empleados laboran bajo protesta
- Al negarles los beneficios de productividad
Brenda Pérez Aguilar
“Alrededor de 60 mil trabajadores a nivel nacional laboran bajo protesta, por lo que éste no es un problema cualquiera, porque somos la empresa privada más grande del país”, reveló el secretario general del Sindicato de Telefonistas de México, Francisco Hernández Juárez, esto en una visita realizada a este municipio.
Quien además enfatizó que, si no les pagan los beneficios por productividad, llegarán hasta la huelga, puesto que sí reconocen el compromiso que tienen con ellos al decir que no hay dinero.
Recordó que el año pasado a cada trabajador por cumplir las metas que se pactaron con la empresa le tocaron alrededor de 7 mil pesos y este año, dicen que no van a repartir más que 500 pesos por trabajador, lo que obviamente es mucha la diferencia, por lo que todos están muy molestos.
“Tengo confianza de que esto se resolverá, hoy recibí de parte de la empresa, la disposición de sentarse a discutir con nosotros o bien la semana que entra la llevaremos a la Secretaría de Trabajo a tratar de resolver el problema”, remarcó. Precisó que lo que menos quieren es un conflicto, pero así como están las cosas, aquí no hay para donde hacerse, o cumplen y les pagan o se van hasta las últimas consecuencias, ya que de lo contrario, al rato les dirán que ni el salario les sufragan, por ello, todos los trabajadores a nivel nacional están laborando bajo protesta, por lo que seguirán tomando medidas para que la empresa entienda que no hay forma de evitar que cumpla su compromiso y les pague lo que les corresponde.
Desde hace tres semanas, precisó, se viene arrastrando esta situación, pero en sí es más tiempo, porque ya les deberían de haber pagado desde principios de abril, lo que los tiene preocupados, pero obviamente también están a la expectativa, porque ya la próxima semana al parecer saldrá la nueva ley de Telecomunicaciones, por lo que esperan que se componga el ambiente, porque desde su punto de vista, no cree que a Teléfonos de México les quieran cargar la mano.
