Elizabeth Aviña/Coatzacoalcos, Ver.- Aunque el Día del Maestro es una fecha para que los docentes celebren por sus triunfos y sean reconocidos por su gran labor, este año en la escuela Ibero Veracruz recordaron con afecto a quien fue su supervisor de zona, mismo que por padecimientos crónicos perdió la vida el año pasado.
Al respecto la directora de la sección primaria, María Teresa Escalante Alcalá, expuso que aunque la escuela ha tenido diferentes supervisores este ha marcado la escuela debido a su carisma y forma de ser.
“El maestro José Antonio Gongora Chi tenía un carisma increíble, nunca lo vimos enojado aun habiendo motivos, siempre le buscaba el lado bueno a la vida, su sonrisa era tan agradable que contagiaba, tenía la mirada de un hombre joven, y en las reuniones siempre tuvo la virtud de decir las cosas de la mejor manera, era cordial y siempre enseñaba sus conocimientos”, afirmó.
Expuso que este profesor que tenía bajo su cargo la zona 74 con nueve escuelas, seis oficiales y tres particulares, era originario de Campeche, y tras obtener su plaza comenzó a laborar por varias ciudades.
Cuando este maestro llegó a Coatzacoalcos ya había sido educador en municipios como Las Choapas y Minatitlán, para posteriormente ser nombrado supervisor.
Con casi 60 años él asumía su cargo con gran responsabilidad, era amigo de los alumnos que aquí estudiaban, le gustaban mucho las flores, las damas, siempre encontraba una virtud de las mujeres, y le encantaba comer, explicó la maestra.
Dijo que en honor a él, el pasado mes de muertos el altar que se puso en la escuela fue dedicado a él, para eso su familia fue invitada y lo recordaron como los grandes.
La directora dijo que su muerte fue sorpresiva, y un golpe muy fuerte para los que lo apreciaban, en este día lo recordaron con mucha alegría y dijeron esperar que las nuevas generaciones de docentes logren ser como el profe Gongora era.
