En el mercado Unidad Veracruzana.
Sergio Aldazaba/AVC
Veracruz
Locatarios que laboran en el mercado Unidad Veracruzana, estuvieron a nada de linchar a un hombre que presuntamente intentó abusar sexualmente de un niño de apenas tres años de edad la tarde de este lunes.
Minutos antes de caer el sol, decenas de personas se congregaron en la entrada de la calle Úrsulo Galván casi esquina Cañonero Tampico, donde le propinaron la brutal golpiza al señalado.
Testigos afirmaron que el menor con identidad resguardada, le dijo a su mamá, una locataria del mercado, que el sujeto en cuestión lo había manoseado en las escaleras, pero logró soltarse de sus manos.
Inmediatamente al escuchar lo relatado por el niño, otros comerciantes colegas de la señora se abalanzaron sobre el presunto violador, a quien en pocos segundos lograron someter por la fuerza.
Fue así que dio inicio a la brutal golpiza contra el acusado de aproximadamente 40 años de edad, el cual hizo lo que pudo por escapar pero los locatarios iracundos se lo impidieron.
El sujeto recibió desde golpes y patadas, hasta cinturonazos y tablazos, pues lo dejaron prácticamente desnudo mientras otras personas más dieron aviso a las corporaciones policiales y de rescate.
A su llegada, la turba enardecida se negó a entregar al sujeto, a quien golpearon varios minutos más para cobrar venganza, en tanto los uniformados pidieron el apoyo de más unidades.
Policías Navales y Estatales trataron de dialogar con las personas, pero estas lo retuvieron varios minutos más mientras continuaban con la golpiza, pues decían que las autoridades nunca hacen nada y solo sueltan a los criminales.
Fueron varios minutos en los que los presentes desataron toda su ira contra el señalado que quedó tirado en la banqueta completamente desfigurado del rostro, con el torso desnudo y los pantalones en los tobillos.
Tras un extenso diálogo, los elementos de dichas corporaciones convencieron a los presentes y junto a otra docena de elementos que llegó en apoyo, de que se los entregaran, pues ya planeaban sacar gasolina para rociarlo y quemarlo vivo.
Los agentes le salvaron la vida al presunto violador quien como pudo, se puso de pie y fue llevado a la seguridad de una patrulla ubicada en la esquina de Nicolás Bravo y Juan Soto.
Los comerciantes siguieron a los policías y aprovecharon para advertirle al sujeto que nunca más vuelva a pisar el mercado, por lo que fue retirado de inmediato pues continuaban amenazando con bajarlo para terminar lo que empezaron.
Por su parte la mamá del menor agraviado junto con este, se fueron con los agentes hacia la Fiscalía Regional para interponer la denuncia correspondiente contra el presunto pederasta.