FELIPE DE JESÚS FERNÁNDEZ BASILIO
Me dirán queridos lectores, ¿qué tienen que ver uno y otro personaje?, les respondo con la verdad: Nada; Sin embargo me quise tomar unos días en la pasada Semana Santa y resulta que ahora tenemos dos temas relevantes que tratar, justa medida por no haber escrito en dicha semana, sin embargo diré en mi descargo que en el tiempo del Sábado Santo el tema de Duarte estaba todavía muy reciente para poder abordarlo y lo que quiero comentar acerca de Maduro ni siquiera había ocurrido; pero bien, ahora tenemos dos temas que tratar y justo será hacerlo en esta ocasión:
DUARTE
Por fin cayó Duarte, suceso que se festejó en bares y cafés a lo largo de la entidad la misma noche del sábado santo, pero ¿Debemos de festejarlo (aunque sea chocando los vasos de café lechero)? Sí; lo anterior es un hecho que tarde o temprano iba a ocurrir y además era muy deseado por la gran mayoría de la sociedad, (incluso hasta por quienes antes eran sus amigos o empleados, quienes a decir de una entonces diputada local, se vieron beneficiados por sus “chocolates” y quienes ahora claman justicia).
Bien, Duarte ya está preso y seguramente llegará a México en los próximos días para ser exhibido y juzgado para, en el mejor de los casos obtener una condena grande y con lo anterior el asunto del desfalco a Veracruz quedará zanjado.
Ese es el guion que el Gobierno Federal quiere que sigamos y ¿Por qué no deberíamos de hacerlo?, si ya trabajó y podemos obtener justicia, no le vamos a regatear el mérito a la PGR de que logró la captura internacional de Duarte de Ochoa, captura que logró en cumplimiento de una orden de aprehensión girada por un Juez Federal con sede en la Ciudad de México, lugar al que habrá de llegar Duarte en su momento para ser juzgado por los delitos que se le imputan.
Sin embargo y a decir verdad no quedamos conformes con lo anterior, ya que quedan muchos cabos sueltos y en consecuencia muchas tareas pendientes.
Por ejemplo: ¿Por qué sujetarse a un tratado de extradición, con los beneficios que este da para el reo, cuando se sabe a todas luces que este pudiera no aplicar?, la extradición prcede cuando se busca a una persona que legalmente reside o se encuentra en otro país para que responda por delitos que pudo haber cometido en el país que lo busca, caso en el cual se abre una tutela judicial para que dicho individuo sea juzgado únicamente por los delitos que se le formulen en el momento de realizar el pedido y no por otros más, además de que las penalidades para esos delitos no deben de ser mayores a las establecidas en el país que va a extraditar, clásico ejemplo de los anterior es el de los delincuentes que México extradita e Estados Unidos, pese al delito que hayan cometido, no pueden enfrentar la pena de muerte que aunque es posible allá, aquí está abolida.
Pero todo lo anterior parte del presupuesto de la estancia legal del buscado en el país en el que es requerido, lo cual en este caso está en duda, ya que usaba pasaportes falsos y según las investigaciones cruzó por un llamado “punto ciego” al país vecino y si como se supone no era en modo alguno legal su estadía, ¿Por qué no procedió lisa y llanamente la expulsión de Duarte y su entrega en la frontera?, ya que al parecer no era legal su estadía en Guatemala.
Pero en fin, Duarte fue capturado y está sujeto a un proceso de extradición, ahora la Fiscalía de Veracruz debe de trabajar para ampliar las denuncias y lograr que el imputado pueda comparecer también en Jalapa (Pacho Viejo) y sobre todo presionar y denunciar a tanto a la PGR como a la SRE para que atiendan sus pedidos dentro del plazo legal y si no lo hacen utilizar todos los medios posibles para denunciar esa situación, ya que cuando la justicia guatemalteca se pronuncie sobre la extradición de Duarte establecerá por qué delitos debe de ser juzgado y en estos 60 días naturales México debe de pedirlos, ojo no importa la rapidez con que se haga sino que el pedido sea completo, es decir no queremos un pedido exprés sino lo que buscamos es que lleve todas las acusaciones que haya en contra de ese personaje, así tengan que cumplirse los dos meses.
Otra cuestión a tratar, ¿Con la captura de Duarte es posible obtener justicia? No, tan solo la señora Karime Macías (no vamos a caer en la misoginia de AMLO al llamarla como “la esposa de Duarte” cuando ella es una persona totalmente independiente de él) anda libre por el mundo, sin rendir cuentas de lo que se le acusa y ¡Vaya que hay elementos para por lo menos llevarla a juicio! y que en el mismo se esclarezcan los hechos; vaya no pedimos su encarcelamiento inmediato pero sí su sujeción a proceso, pero eso sí, garantizar que ella se encuentre en territorio veracruzano hasta en tanto sea juzgada (incluso con brazaletes electrónicos o la medida cautelar que sea más apropiada para el caso), pero no es tolerable que se diga que contra ella no hay nada, cuando existen indicios suficiente para llevarla a juicio, basta como referencia lo encontrado en aquella bodega de Córdoba.
Mas es poco lo que podemos esperar de la PGR de Peña, la misma que hizo todo lo posible para exonerar a Humberto Moreira, incluso cuando este cayó preso en España; que no persigue a Fidel Herrera ni a Ulises Ruíz ni a Murat ni mucho menos a Ivonne Ortega Pacheco, quien por mucho es la más afortunada de toda la caterva de políticos ilustres del PRI, ya que a pesar de todo lo que hizo en Yucatán cuando fue gobernadora a la fecha disfruta de los más altos cargos que su partido le puede dar y ni qué decir de la mayor rata de todas: Montiel, padrino y creador de Peña, cuyas corruptelas hoy ya han quedado prácticamente en el olvido y la PGR que ahora los priístas ensalzan tanto por haber capturado a Duarte, nada ha hecho en su contra.
Y concluyo el tema precisamente señalando a todos los priístas que desde el que fuera el más pequeño achichincle de Duarte hasta Peña (a quien le financió su campaña con recursos desviados del estado), son quienes ahora claman porque se haga justicia, cuando en su momento fueron sus amigos del alma o sus fieles empleados según sea el caso; personas que al menos por la mínima lealtad hoy en día mejor se verían callados ante la desgracia de su compinche y no vociferando en favor de banderas contrarias a la que fue la suya, ya que la lealtad y la congruencia deben de prevalecer ante todo y en verdad es algo digno de la peor de las canallas (como decían en la época novohispana) el recibir “los chocolates” cuando el señor estaba en todo su poder y hoy por hoy, cuando ha caído en desgracia, no solo negarlo sino volverse en contra de él; eso sí que es repugnante ya que no hay nada peor que la traición y lo ético es permanecer fiel siempre, tanto en la bonanza como en la desgracia y si eso no es posible al menos quedarse callados.
Maduro.
Ahora vamos a hablar de uno de los personajes más grotescos que la historia universal ha conocido y ese personaje es sin duda alguna Nicolás Maduro, quien es presidente de Venezuela y vaya que decir presidente es algo muy condescendiente, ya que en verdad es uno de los cuasi dictadores, (y digo cuasi dictador, porque a la fecha está amparado por un mandato constitucional del que no dudo que cuando éste fenezca su designación perderá el prefijo para quedar lisa y llanamente como un dictador) más brutales que la historia de la humanidad haya conocido, pero que no es censurado como tal, merced a la hipocresía que tiene la llamada izquierda latinoamericana.
Y sí, queridos amigos, el personaje en cuestión es un verdadero tirano, ya que se ha dedicado a sabotear a todas las instituciones que son contrarias a sus designios, hoy por hoy vemos como ha atacado frontalmente al poder legislativo de su país, ya que infirió a través del poder judicial un ataque anticonstitucional en contra del poder legislativo, ya que por una sentencia inconstitucional y antidemocrática dicha Corte usurpó los poderes de la Asamblea Nacional, lo cual es como si la Suprema Corte de Justicia de la Nación, con todo y sus expertos en derecho, quisiera sustituir en sus funciones a ambas cámaras del Congreso de la Unión como legisladores, porque en la suma de sus integrantes predomina la oposición al Presidente de la República.
Pues bien, eso es lo que ocurrió en Venezuela, un verdadero golpe de estado, ya que un poder con la venia de otro usurpó las funciones de un tercer poder, es decir el poder judicial con la anuencia del ejecutivo usurpa las funciones del legislativo y eso aquí y en China se llama “Golpe de Estado”, le guste a quien le guste y le pese a quien le pese.
Pero además el aspirante a tirano en cuestión es una persona burda y soez, ¡Qué se puede esperar de un analfabeto! pero eso sí son los peores, recordemos a Stalin.
Y ¿Por qué digo que Maduro es una persona burda y soez?, lo digo, porque ante el manifestante que se paró desnudo, ante sus tanquetas para demostrar que no llevaba armas en su cuerpo, hizo la burla homofóbica de “que solo faltó que se le cayera el jabón”, cuando a ese manifestante lo acribillaron sus esbirros a más no poder con perdigones a pesar de lo gráfica que era su indefensión; esa es una muestra de lo intolerante que es Maduro frente a quienes no piensan igual que él.
Y me dirán que se trata de unos facinerosos en contra de la autoridad constitucionalmente establecida, pero les voy a decir que la legitimidad hace tiempo que pasó a la cancha de los protestantes, ya que la misma Constitución, la cual fue hecha a modo por Chávez y que rige ahora en Venezuela es muy clara al permitir la revocación del mandato y su letra es no solo dificultada sino ignorada por Maduro y sus secuaces, quienes no solo han paralizado los trámites legales para lograr el referéndum revocatorio que pide la oposición, sino que también han usado toda la fuerza del Estado para reprimir a quienes piensan diferente y aun cuando los opositores ganaron la mayoría en el Legislativo, ahora resulta que son ilegales y ante todo ello no resulta posible nada más que la manifestación en las calles y la espera del reconocimiento internacional a su causa.
Reconocimiento que va a ser a medias, debido a la hipocresía que reina en torno a las dictaduras de izquierda, principalmente en Latinoamérica, hipocresía que consiste en subclasificar, incluso hasta arbitrariamente a las dictaduras, en de izquierda y de derecha, cuando todas son exactamente iguales, es decir: unas tiranías.
Pero en nuestra doble moral iberoamericana tenemos que son diabólicas las dictaduras de Pinochet, de Franco, de Salazar, de Somoza y muchas más que no socialistas, (aunque en la práctica fueron iguales a las socialistas); en cambio son maravillosas, vaya casi estado de perfección angelical, las dictaduras de Castro, Chávez (Maduro incluido), Sandino, Evo Morales, Rafael Correa y muchos más especímenes que tenemos en nuestro subcontinente.
Pero a ver, en un ejercicio de reflexión queridos lectores: ¿Quién de Ustedes hubiera querido vivir bajo el régimen de Franco o el de Pinochet, en donde cualquier opinión en contra del régimen era violentamente reprimida? Yo creo que nadie. Y ahora les pregunto ¿Quién de Ustedes quiere vivir bajo el régimen de Maduro (Chávez) o el los hermanos Castro en donde, al igual que en los regímenes señalados anteriormente, cualquier opinión divergente es reprimida?; por supuesto que tampoco nadie.
Sin embargo la similitud es más que manifiesta, ya que se trata de regímenes totalitarios que se fundan en la ignorancia y consecuente sumisión popular ante dictadores que como reyes absolutos pretenden regir la vida entera de las naciones que por desgracia les toca gobernar.
Pero el problema es la dicotomía o doble moral que en nuestra Iberoamérica persiste, ya que mientras los no izquierdistas son unos tiranos ejemplares, los izquierdistas son unos ángeles redentores del pueblo, cuando en verdad son exactamente iguales a los primeramente señalados.
Es decir y parafraseando al dicho del pato: “Si Maduro actúa como tirano, se mueve como tirano, se manifiesta como tirano: entonces es ¡Un tirano!, Y como tal deberíamos de tratarlo, pero no: ¡La doble moral iberoamericana impera y solo se denuncia tibiamente al dictador!
Y nuestro supuesto redentor AMLO ¿Qué dice al respecto?, nada de nada, ya que él “Brincos diera para ser aquí en México, al menos la tercera parte de lo que es Maduro en su país”, tal y como el dicho popular reza.
Twitter: @fefebas