Brenda Caballero
Gracias a la reforma hacendaria y energética, por primera vez en 5 años ya no habrá incrementos mensuales a los precios de la gasolina, el diésel y el gas LP.
¿Recuerda usted este mensaje de año nuevo en 2015? Efectivamente, era el mensaje del presidente Enrique Peña Nieto que daba a los mexicanos para convencernos de los beneficios de sus reformas estructurales.
Muy poco nos duró el gusto, pues a partir de julio de este año, la gasolina se incrementó y ahora la Secretaría de Hacienda sale con que habrá aumentos en los combustibles a partir del primer día de 2017, en un 20 por ciento en las gasolinas y 16.5 por ciento en el diésel.
Y no, no era una broma de los Santos Inocentes, la noticia del incremento al precio de la gasolina y los combustibles es una realidad que los mexicanos ya estamos padeciendo; pero ¿cómo? si aún no se aplica.
Fácil, haciendo cuentas, tendremos que estirar el salario que ganamos en virtud de que se vendrán aumentos en cascada propiciando una mayor inflación que se estima en casi un 5 por ciento. Por ejemplo, la leche subiría un 10 por ciento y el arroz un 30 por ciento. ¡Todo un lujo para los que ganan el salario mínimo!
Se estima el aumento en todos los bienes y servicios en un 5 por ciento aproximadamente.
Pero ¿cuál será el precio de los combustibles en 2017? Según Hacienda, los precios serán variables y no por la oferta y la demanda del mercado internacional, sino por mera ocurrencia de algún analista financiero de Hacienda. Por eso, el precio aplicado del 1° de enero estará vigente hasta el 3 de febrero; y éste a su vez, será aplicado hasta el 18 de febrero. De allí en adelante, los precios tendrán 24 horas, sujetándose a lo siguiente: Habrá ajustes diarios los martes, miércoles, jueves y viernes, mientras que los sábados, domingos y lunes el precio estipulado será el máximo, hasta que no se haya flexibilizado el mercado de combustibles. En pocas palabras para poder ahorrar, la recomendación sería no cargar combustible en fin de semana.
Ahora que también los precios dependerán de la región en donde se compre el combustible, pues de las 90, el estado donde se pagará más será Jalisco y donde se pagará menos será Veracruz, por lo que ya se corre el rumor de que puede haber desabasto.
Ante el incremento anunciado, a través de redes sociales, ya se mueven mensajes de revolución pacífica para no consumir gasolina por 3 días, creando un supuesto boicot y repetirlo cada fin de semana.
Pero ¿ayudaría esta medida? Según el líder de los gasolineros, el boicot ciudadano no les haría ni cosquillas, pues aguantarían hasta un mes sin vender gasolina; sin embargo, el país no podría soportarlo porque entonces, cómo se moverían los alimentos, el material para obra, medicamentos, etcétera…
¿Qué viene entonces?
Un año demasiado complicado en el que seguramente se incrementará el número de pobres en el país pues se prevé que también la luz eléctrica suba su costo. Entonces no habrá cuesta de enero, sino cuesta de todo el año.
@NumerosRojos_BC