Brenda Caballero
“En breve habrá resultados sobre la captura de Javier Duarte”, dice el marido emocionado. Primera pregunta ¿Quién lo dice? Pues dijeran por allí, dependiendo la fuente es la certeza de la información.
Ni tardo ni perezoso me manda link por whatsapp. La fuente es Renato Sales Heredia, titular de la Comisión Nacional de Seguridad, quien sostuvo una reunión con la Cámara de Diputados ¡Ah, entonces sí es información confiable! ¡Ya lo deben tener ubicado! Sales afirma: “En breve habrá resultados, no podemos dar un día fijo, por supuesto, pero continuamos trabajando para dar con su ubicación”.
¡Óigame señor Comisionado, eso ya lo sabemos, o al menos nos imaginamos que siguen trabajando! Lo que necesitamos para seguir creyendo en las instituciones de justicia del país es resultados inmediatos y no largas a la justicia.
¿Cómo es posible que diez días después, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) emita un comunicado para decir que los pasaportes con las fotografías de Javier Duarte y Karime Macías son falsos? Pues recordemos que la noticia del hombre detenido con los pasaportes se dio a conocer una semana posterior a que ocurrieran los hechos. ¿Les dieron más tiempo para huir?
Y para tranquilizarnos expresa: “Los documentos en cuestión no hubiesen sido aceptados por ninguna autoridad migratoria en el extranjero por carecer de los elementos de seguridad de los pasaportes mexicanos”.
Definitivamente, la SRE tenía que decir que eran falsos. ¿A poco iba a aceptar que eran verdaderos?
Lo peor de todo esto es que dejaron libre al hombre que los portaba, el que seguramente sabe dónde localizarlos, pues es pariente de Karime Macías.
Pero eso no es lo peor, la gravedad del asunto radica en que todos los gastos generados para “buscar” a Javier Duarte recaen en todos los mexicanos.
Y pues el gobierno de Enrique Peña Nieto debe ser multimillonario, pues ahora a través de la PGR ha sacado un comunicado en el que ofrece otra recompensa de hasta 15 millones de pesos por Tomás Jesús Yarrington Ruvalcaba ¡Por Dios! Un hombre que dejó de ser gobernador de Tamaulipas desde hace más de 10 años y que fue acusado en el 2012 por lavado de dinero.
Quisiera no ser mal pensada, pero ¿a qué viene ahora el interés por buscar a todos los ex gobernadores corruptos? ¿De qué partida vienen las recompensas? ¿Cuánto nos costará a los mexicanos?
Si hacemos cuentas, los 30 millones de recompensa más los gastos que generan sus búsquedas, bien podrían aplicarse para los rubros de salud, educación, deporte, investigación, etcétera, o mejor aún, para prevenir otros casos similares de corrupción de gobernadores que son focos rojos en México.
Considero que el Presidente Peña Nieto y su Gabinete, principalmente el de las cuentas, Antonio Meade Kuribreña, deberían voltear los ojos a la información que recientemente hizo pública el Instituto Mexicano por la Competitividad (IMCO) correspondiente al segundo trimestre de 2016, donde señala que la deuda de todos los estados asciende a 515 mil millones de pesos, señalando a Chihuahua, Nuevo León, Ciudad de México, Veracruz, y el Estado de México como los más endeudados. Si bien es cierto que el gobernador pudiese hacer contraído deuda para invertir en el desarrollo de su estado, tenemos ejemplos claros de corrupción como el de Veracruz y Chihuahua que no siempre es así.
Entonces ¿Ya mero cae Javier Duarte? ¿Nos sirve de algo? ¿Nos ayudará a pagar los 5 mil 162 pesos con 7 centavos que debemos cada veracruzano por su culpa?
¡Olvídelo!, esa deuda pér capita calculada por deuda del estado, ha aumentado, con todos los gastos, viáticos y recompensas que el gobierno federal ha empleado para seguir en su búsqueda. Aumente a nuestra deuda estatal, la federal. Entonces sí… ¡estamos bien jodidos!