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CÓRDOBA
Trabajadores y dueños de botaneros, bares y cantinas asentados en el municipio cordobés, mantuvieron tomada la entrada principal del Palacio Municipal, impidiendo el ingreso de empleados municipales, así como de la ciudadanía en general.
Los más de 200 protestantes amagaban con permanecer el tiempo que fuera necesario hasta que fueron atendidos por el Cabildo y principalmente por la alcaldesa Leticia López Landero.
Lamentaron que las autoridades municipales se nieguen a dar la autorización de la apertura de estos negocios, cuando en la ciudad de Orizaba estos comercios ya trabajan desde inicios del pasado mes de agosto, bajo el esquema de la nueva normalidad.
Los cantineros manifestaron que de un total de un mil 100 negocios que existen en el municipio, más de siete ya cerraron sus puertas definitivamente, mientras que otros más ya están considerando hacer lo mismo, debido a que no cuentan con los recursos para su reactivación desde ceros.
"Tenemos un poco más de siete negocios que ya tiraron la "toalla", nosotros ya estamos por tirarla igual, a la compañera y al compañero les robaron cuando empezó la pandemia, entonces imagínese lo complicado que será la reactivación".
Así mismo dijeron sentirse decepcionados y desamparados, pues la alcaldesa les da largas, además de que se niega a atenderlos.
"Sus trabajadores nos dicen que van a tratar, que van a ver para que nos den una respuesta, la última vez que tuvimos una reunión con tres integrantes del cabildo, se comprometieron que en la próxima reunión estaría todo el cabildo incluyendo a la alcaldesa y es la fecha que no se ha llevado a cabo la reunión".
Los comerciantes dijeron estar dispuestos a trabajar aplicando todas las medidas necesarias para evitar contagios de Covid, además de solo operar del 30 al 50 por ciento de su capacidad del establecimiento.
Finalmente dijeron que a pesar de que el ayuntamiento cordobés está violando sus derechos constitucionales, que es el derecho al trabajo, todavía al lugar arribaron oficiales de la Policía Municipal y Estatal a intentar desalojarlos.
Es de señalar que los protestantes abandonaron el Palacio Municipal y se trasladaron a la Ex Hacienda Toxpan, luego de que se enteraran que la alcaldesa Leticia López Landeros sostenía un evento, aunque desafortunadamente tampoco fueron atendidos.