
José Juan García/AVC
Veracruz
Este 12 de diciembre se cumplieron 10 años de que los estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa incendiaran una gasolinera a las afueras de la ciudad de Chilpancingo, Guerrero, donde laboraba el veracruzano Gonzalo Miguel Rivas Cámara, quien falleciera el 1 de enero del 2012 a consecuencia de las quemaduras de tercer grado que sufrió en más del 30 por ciento de su cuerpo al cerrar las válvulas de los depósitos de combustible para evitar una desgracia de enorme magnitud.
“El Héroe de Chilpancingo”, quien recibió post mortem la medalla Belisario Domínguez por parte del Senado de la República el 14 de noviembre del 2016, fue recordado en las redes sociales por arriesgar su vida pese al peligro, salvando a cientos de personas, incluidos a los normalistas rurales de Ayotzinapa.
Lucía @embolicat compartió en la red social Twitter: “Hoy debemos recordar un acto heroico que muchos prefieren olvidar. Hace 10 años, un humilde empleado arriesgó su vida –y la perdió- al cerrar el tanque de gasolina incendiado por los estudiantes de la normal de Ayotzinapa. Su nombre: Gonzalo Rivas Cámara. Gonzalo Rivas Cámara no tenía por qué ser un héroe. Podía haber huido del peligro y salvarse. Pero Gonzalo Rivas Cámara vio lo que podía ocurrir si ese tanque explotaba y supo que solo había una cosa que hacer. Y la hizo”.
El ingeniero en Sistemas Computacionales no sobrevivió a las quemaduras. Durante 19 días se debatió entre la vida y la muerte en el Hospital del IMSS de Lomas Verdes, en Naucalpan, Estado de México.
El entonces gobernador de Guerrero, Ángel Astudillo, lo nombró “Hijo Predilecto” en un homenaje póstumo al veracruzano.
“Ahora Gonzalo Rivas Cámara ha caído casi en el olvido. El actual presidente no lo va a mencionar jamás porque sus fanáticos no se lo perdonarían. Y porque, para él, no hay más héroe de la película que él mismo. Y por eso habla de Nintendo y Chabelo. Así le resulta más fácil. Pero la memoria de Gonzalo Rivas Cámara vive. Vive en sus hijas que lo perdieron muy pronto. En la memoria de sus padres y de su viuda”, compartió Lucía @embolicat en su cuenta de la red social.