Influyentismo, difícil de erradicar.
Yhadira Paredes
Xalapa
El influyentismo y el compadrazgo ha sido una práctica muy difícil de erradicar cuando se trata de someterse a sanciones por violaciones al reglamento de Tránsito y Seguridad Vial, aseguró el titular del ramo, Enrique Meneses García.
En entrevista, el funcionario dependiente de la Secretaría de Seguridad Pública indicó que es común que durante los operativos de alcoholimetría se topen con conductores en estado de ebriedad, hombres y mujeres, que presumen sus influencias y amenazan a los elementos de la Dirección a su cargo.
Sin embargo, advirtió que ninguna “charola, amiguismo o compadrazgo” evitará que sean sancionados y en caso de ser necesario les sea retenido el vehículo.
“Ellos no han entendido (los conductores) que el operativo no va dirigido a levantar una infracción, sino a salvar su vida, si nosotros detectamos el vehículo y lo retenemos a una persona que va en estado de ebriedad o con consumo de estupefacientes, lo que realmente estamos haciendo es salvar vidas”.
En ese sentido, refirió que el influyentismo no se ha podido desarraigar y hay mucho funcionario público que cae en la debilidad de presumir que son amigos o compadres de altos funcionarios, pero eso no les evita ser sujetos a las sanciones correspondientes y al retiro del vehículo.
“La instrucción es que el reglamento se aplique sea a quien sea, funcionario, hijo de funcionario, compadre, periodista. Yo invito a los funcionarios a que concreticemos y pongamos el ejemplo para que al usuario normal no tengamos ningún problema al sancionarlo”, finalizó.
Por otra parte, destacó que los operativos de alcoholimetría son útiles y han demostrado su eficacia en la reducción de accidentes los fines de semana.
Finalmente, informó que este programa se realiza de manera aleatoria en diversos puntos para evitar que los mismos conductores eviten los sitios donde están ubicados los puestos de revisión y busquen vías alternas, lo que los pone en riesgo a ellos y a la ciudadanía en general.