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XALAPA
Como cada año, en medio de la polémica, se llevará a cabo el próximo domingo la tradicional xiqueñada, ahora llamada capea, en el marco de las fiestas en honor a María Magdalena en el municipio de Xico, Veracruz, que este año se realizarán del 19 al 23 de julio. Y es que las organizaciones defensoras de animales afirman que aunque para violar la ley los organizadores cambien el nombre de pamplonada o vaquillada, por el de capea, lo cierto es que el animal sigue siendo víctima de maltrato por parte de la gente, lo que se traduce en estrés.
“Los nombres son teóricos, solo son palabras que confunden a la sociedad, pero el maltrato está vigente”, ha señalado Claudia Leonardo Landa, integrante de la organización pro defensa de los animales Movimiento Conciencia.
AUNQUE AHORA LE LLAMEN CAPEA, EL MALTRATO ANIMAL ESTÁ PRESENTE
No obstante para los defensores de la capea, tanto el llevar a cabo la suelta de toros por la calle Miguel Hidalgo como la corrida de toros que se realiza posteriormente –además de la fiesta religiosa–, atraen a miles de turistas, lo que se traduce en una importante derrama económica para los prestadores de servicios de la región: llámese hoteleros, restauranteros, vinateros y comerciantes de todo tipo.
Violación de la ley permitir menores en corrida de toros. Apenas este lunes Movimiento Conciencia pidió la intervención de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) en el caso específico de la corrida de toros que se realizará el 22 de julio, con la finalidad de impedir la entrada de menores a dicho evento.
Aseguran que se viola el Artículo 40 bis de Ley de Derechos de Niños Niñas y Adolescentes, que prohíbe el ingreso de menores a corridas de toros.
Leonardo Landa explicó que además solicitaron mediante una solicitud de amparo que las autoridades municipales modifiquen la publicidad del evento para que quede claro que no permitirán la entrada de menores de edad para no exponerlos a actos de violencia que se escudan en ser tradiciones.
El pasado 25 de junio, esta misma organización presentó una denuncia contra el fiscal especializado en delitos ambientales y contra el maltrato animal de la Fiscalía General del Estado (FGE), Andrés de la Parra Trujillo, así como en contra del ex alcalde de Xico, Lorenzo Pozos, por los actos cometidos en la suelta de toros del pasado 22 de julio de 2017, y la corrida de toros que se realizó al día siguiente.
Dicha denuncia fue presentada por la Fundación Internacional por el Reconocimiento de la Conciencia de los Derechos de los Animales, fundamentada en que el artículo 28 de la Ley de Protección de los Animales del estado de Veracruz prohíbe vaquilladas, pamplonada o maltrato animal.
Los delitos que se configuran son: maltrato animal, incumplimiento del deber legal y no velar por el interés superior del menor. FGE prohíbe xiqueñada en 2017 y se retracta, apenas el año pasado la FGE envió tres exhortos: al entonces presidente municipal de Xico, al presidente de la Asociación Ganadera de esa localidad y al representante del Comité de la Xiqueñada, para reiterarles la prohibición vigente en el estado, relativa a la organización y desarrollo de actos de crueldad y maltrato a animales, en específico, durante los festejos patronales de ese municipio.
Con las notificaciones recibidas, tanto particulares como servidores públicos se encuentran notificados de manera oficial y preventiva de la responsabilidad penal a la cual se harían acreedores quienes trasgredan con sus actos u omisiones lo estipulado por la ley vigente en materia de protección animal. Y advertía que se realizaría un operativo en el que se solicitaría la participación de todas las fuerzas del orden a nivel estatal; así como de autoridades investigadoras que preservarán el orden y harán cumplir la Ley.
“Queda de manifiesto que la Fiscalía General del Estado desaprueba la realización de cualquier espectáculo que vulnere la integridad de seres vivientes y susceptibles de sentir dolor y sufrimiento, aunado a que el no cumplimiento de la Ley de Protección a los Animales faculta al órgano autónomo a actuar en consecuencia contra quien incumpla el ordenamiento legal, sin distingos de ninguna especie”.
Sin embargo durante la inauguración de la fiesta patronal, el mismo gobernador Miguel Ángel Yunes Linares hizo acto de presencia en el evento, acompañado por el fiscal Andrés de la Parra, y anunció que permitiría el desarrollo de las fiestas como normalmente se realizan año con año.
“Si habrá xiqueñada, con respeto pleno a los animales. Yo soy partidario de que a los animales se les respete, pero hay maneras de convivir con la tradición, respetando a los animales”. Y es que el mandatario aseguró que junto con las autoridades se tomaron las medidas necesarias para evitar el maltrato a los animales, sin perder la tradición de la xiqueñada y la corrida de toros.
MILES DE TURISTAS REACTIVAN LA ECONOMÍA DE XICO
Autoridades municipales calculan que tan solo el fin de semana en que se realiza el tapete de aserrín, se levanta el arco floral, se presentan los toritos encohetados y se realiza la capeada y la corrida de toros, además de los bailes nocturnos, la afluencia turística es de casi 100 mil personas. En tanto que la derrama económica para hoteleros, restauranteros y comerciantes de artesanías y bebidas alcohólicas, además de ambulantes, rondaría los 20 millones de pesos diarios, solo ese fin de semana.
Esto a pesar de que el año pasado, entre que si se realizaban las fiestas y no, muchos turistas decidieron no acudir, con lo que se tuvo una merma en el número de visitantes.
“No es lo mismo un toro cebú que uno de lidia”. Gabriela Roldán, especialista en el arte taurino, con estudios en la Universidad Nacional Autónoma de México y Universidad Popular Autónoma de Veracruz, capacitación en primeros auxilios en este tipo de eventos y con experiencia laboral en plazas de toros de la capital del país, Puebla y Tlaxcala, ha señalado en entrevistas a AVC que frente a una tradición que viene de hace 42 años (en cuando a la xiqueñada) y un arraigo taurino de hace más de 100, es un tema de vital importancia que debe ser analizado por todos.
Tras destacar que los xiqueños están en su derecho de defender “nuestras tradiciones, usos y costumbres”, menciona que tan solo el día de la capeada y la corrida de toros, esta población espera el arribo de 100 mil turistas, que lo mismo comen, compran artesanías, vinos locales y llevan una importante derrama económica.
Además menciona que el ganado cebú de Tlacotalpan es distinto al de lidia de Xico y es allí donde radica la diferencia, pues aunque son bovinos, son razas totalmente distintas ya que al toro cebú te le puedes acercar y acariciarlo; eso da pie al maltrato, al jaloneo y que lo monten.
“En Xico se sueltan toros, pero son toros bravos, no hay maltrato animal, es una raza brava, no te le puedes acercar. Válgase la comparación, es como un león, un tigre, es un animal salvaje, no le puedes montar nunca, ni agarrar ni acariciar”.