*Marchan miles en diversos estados del país por asesinato del fotoperiodista Rubén Espinosa
*Fue hallado muerto con tiro de gracia en una vivienda de la Ciudad de México
*PGR no descarta investigar multihomicidio
El Universal
México, DF
La muerte del fotoreportero Rubén Espinosa Becerril desató la condena de la sociedad civil y del gremio periodístico, que suma una víctima más a su ya extenso listado de asesinatos en el país.
Miles de personas se congregaron este fin de semana en diferentes plazas de la República Mexicana para recordar al reconocido fotógrafo y activista de 31 años de edad, así como para pedir justicia por el crimen que vuelve a enlutar al periodismo nacional.
"Rubén vive, la lucha sigue, sigue", consignaron los manifestantes mientras portaban carteles con mensajes como "Alto a la impunidad, justicia para Rubén", "Ya basta, ¿cuántos periodistas tienen que morir?".
Las movilizaciones comenzaron desde temprana hora este domingo en diversos estados; conforme avanzaba la jornada, se replicaron en cada vez más plazas, entre ellas, Acapulco, Xalapa y la Ciudad de México, donde tuvo lugar una megaconcentración al pie del Ángel de la Independencia.
El colaborador de la revista Proceso y de las agencias Cuartoscuro y AVC de Veracruz fue muerto el viernes por la noche en un multihomicidio perpetrado en un domicilio de la colonia Narvarte, en la Ciudad de México, junto con cuatro mujeres.
El titular de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), Rodolfo Ríos Garza, indicó que los cuerpos fueron torturados y recibieron el tiro de gracia.
“De conformidad con los reportes periciales, los cuerpos encontrados en las distintas habitaciones del departamento presentaron, cada uno, una herida en la cabeza producida por disparo de arma de fuego calibre 9 milímetros, así como diversas escoriaciones en diversas partes del cuerpo, presuntamente originadas por el forcejeo previo al sometimiento al que fueron expuestos”, comentó el funcionario.
Las primeras investigaciones de la Fiscalía de Homicidios, adscrita a la PGJDF, descartaron la comisión del delito de robo; sin embargo, aún se encuentra abierta cualquier línea de investigación.
“En la parte ministerial se han recabado 15 declaraciones y realizado diversas inspecciones ministeriales, así como el levantamiento de indicios, búsqueda de evidencia videográfica y múltiples peritajes en materia criminalística, fotografía, química y genética”, refirió el procurador capitalino.
Respecto a las otras víctimas, Ríos Garza omitió revelar sus identidades, pero en la averiguación previa se incorporó la perspectiva de género, por el delito de feminicidio.
“La primer víctima de 18 años de edad se desempeñaba como maquillista y era originaria de Mexicali, Baja California; la segunda, de 32 años, era promotora cultural y originaria de Chiapas; la tercer mujer fallecida, de 40 años, fue identificada como la empleada doméstica y provenía del Estado de México; por su parte, la última víctima, de 29 años de edad, aún no se determina su ocupación, pero se sabe que era originaria de Colombia”.
El funcionario explicó que “la Procuraduría General de Justicia del DF activó inmediatamente los protocolos de homicidio y feminicidio, así como el de investigación para atención de delitos cometidos en agravio de las y los periodistas en el ejercicio de esta actividad”.
Por su parte, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) condenó “enérgicamente” el crimen e hizo un llamado a las autoridades a realizar todas las diligencias para determinar el móvil, incluida la línea de investigación relacionada con la labor periodística.
En tanto, la Procuraduría General de la República (PGR) anunció que dará puntual seguimiento y estará al pendiente de las indagatorias que realice la PGJDF sobre el caso.
De acuerdo con fuentes de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos Contra la Libertad de Expresión, la PGR no colaborará en las investigaciones, pues es competencia de la Procuraduría capitalina.
Empero, la PGR podría intervenir, únicamente si la PGJDF así lo solicita; o bien, si lo piden los familiares del periodista asesinado.
Rubén Espinosa llegó hace aproximadamente dos meses a vivir a la Ciudad de México, procedente de Xalapa, Veracruz, entidad de la que decidió autoexiliarse luego de denunciar constante hostigamiento por parte del Gobierno estatal. Se especializaba en la cobertura de manifestaciones sociales.
El dato
El colaborador de la revista Proceso y de las agencias Cuartoscuro y AVC de Veracruz fue asesinado el viernes por la noche junto con cuatro mujeres en la colonia Narvarte.
