*Incendio deja 17 muertos en Mexicali; investigan premeditación
*Ancianos indigentes y sin familia, las víctimas
El Universal
México, DF
Este martes murieron 17 personas y otras cinco resultaron heridas a causa de un incendio en un asilo de ancianos, ubicado en la localidad Ejido Querétaro, en el Valle de Mexicali, Baja California.
El siniestro se registró a las 4:00 horas de este martes en la casa de reposo de adultos mayores Hermoso Atardecer, administrado por una asociación civil. Al momento del percance, 45 personas estaban en el lugar, 23 de las cuales resultaron ilesas.
En entrevista, el alcalde de Mexicali, Jaime Rafael Díaz, no descartó que el siniestro haya sido provocado, por lo que las autoridades se encuentran investigando dicha hipótesis. Lo anterior –dijo– se desprende de comentarios de los propios administradores del lugar.
Luego de informar que cinco de las personas fallecidas no tienen familiares registrados, el alcalde reconoció que la situación general de los adultos mayores en la zona es un asunto de gran importancia, pues hay ancianos que no tienen familia o que son llevados a los asilos por sus propios hijos al emigrar a Estados Unidos.
El asilo tiene una población mayoritaria de personas indigentes, sin familia y sin ingresos, informó el exadministrador del recinto, Humberto Cota. La población de la residencia está formada por personas de más de 65 años.
El asilo es gestionado por la Organización No Gubernamental (ONG) Hogar Hermoso Atardecer Para Adultos Mayores, que supervisa otros centros similares en el área.
La ONG se dedica a albergar a ancianos en pobreza, abandono e indigentes en sus diferentes instalaciones de la zona de Mexicali.
La residencia ofrecía apoyo desde el año 2002. Su principal fuente de ingresos era el apoyo social.
Cota comentó que algunas secciones del asilo del Ejido Querétaro, un barrio humilde ubicado a las afueras de la ciudad, estaban construidas con techos de lámina de metal a causa de las carencias económicas y otros motivos que les impidieron tener instalaciones adecuadas.
La precariedad de esos materiales provocó la rápida propagación de las llamas y el derrumbe de paredes y techos, dejando una imagen de absoluta desolación cuando se extinguió el fuego.
El dato
El alcalde de Mexicali, Jaime Rafael Díaz, no descartó que el siniestro haya sido provocado; aseguró que lo anterior se desprende de comentarios de los propios administradores del lugar.
