Desde su creación, el programa careció de una evaluación de impacto sobre los recursos asignados a más de 660 mil planteles en la mejora de la enseñanza
SEP no justificó el uso de recursos, dice ASF; bullying no disminuyó
MÉXICO, D.F., julio 29 (EL UNIVERSAL).-
Creado en el sexenio de Felipe Calderón, el programa Escuela segura, para combatir la inseguridad y violencia en los planteles educativos, no obtuvo los resultados que se esperaban. El esquema —que arrancó en 2007— contó con recursos por más de mil 85 millones de pesos de 2009 a 2012.
La Auditoría Superior de la Federación (ASF) encontró que la Secretaría de Educación Pública (SEP) no justificó las metas e indicadores del programa, ni en qué se utilizaron los recursos entregados a los estados, con municipios beneficiados.
Las evaluaciones externas realizadas por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo (Coneval) y la ASF señalan que, desde su creación, el programa careció de una evaluación de impacto sobre los recursos asignados a más de 660 mil planteles en la mejora de la enseñanza.
A más de un sexenio de su existencia, el Gobierno federal busca reformar este programa, pues está comprobado que no ha disminuido en su totalidad la violencia, inseguridad y el bullying que padecen estudiantes y profesores en escuelas de educación básica.
El programa se vinculó a la Estrategia Nacional de Seguridad para atender desde la escuela aspectos como las adicciones, la protección civil, mejoramiento de infraestructura y la incidencia delictiva o violencia al interior y exterior de los planteles, pero desde hace más de un año comenzó una transformación a la forma de trabajo.
La SEP inició con modificaciones al esquema educativo para construir “ambientes de convivencia pacíficos, incluyentes e inclusivos”, explicó Pedro Velasco Sodi, director general Adjunto de Gestión de la Subsecretaría de Educación Básica de esta dependencia.
El funcionario reconoce que de las 39 mil escuelas que se encuentran en los polígonos de mayor incidencia delictiva en el país, alrededor de 20 mil podrían enfrentar “condiciones importantes” de inseguridad o violencia al interior o exterior de los planteles.
