El munícipe descartó que las acusaciones contra la ex alcaldesa formen parte de una “persecución política”, pues destacó que se trata de la muerte de una persona y añadió que es un parteaguas para el resto de los ex funcionarios.
“Una muerte no es persecución y no es de repente, la población sabe que desde el inicio de la administración hay un mal funcionamiento pero nosotros llegamos con el ánimo de trabajar traemos un proyecto y quienes tengan que ver que pongan las barbas a remojar quienes tengan que ver a lo mejor no sólo es ella si no hay alguien más, lo que a mí me compete es la administración municipal”, dijo.
En este contexto confirmó un daño patrimonial severo y servicios públicos deficientes por lo que se espera que a fin de mes, el actual Ayuntamiento presente una denuncia ante el Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS) por quebranto.