Josefina Constantino precisó que fueron cuatro viviendas las que resultaron deshechas a manos de personas lideradas por el exdirigente Andrés Hipólito Requena, quien decía “que él tenía todo arreglado”, pero que “les exigía 25 mil pesos” por cada uno de los predios. “Nos sacó 600 pesos para un planito, que nos iba a servir, nos pidió 800 pesos para pagar, según él, el predial, para que fuera más fácil de arreglar nuestro asunto”, entre otros gastos, por los cuales desde noviembre pasado decidieron separarse de su representante.
“Nosotros desde ahí nos separamos, y de ahí él nos amenazó que si no dábamos el dinero, y que si seguíamos, él nos iba a tumbar las casitas, y que por las buenas o por las malas íbamos a entrar. Y ahorita vemos que lo está haciendo, porque nos tumbó cuatro casas, la madrugada del domingo, y se llevaron lo que más servía, se llevaron la lámina de zinc, ropa, cilindros y mesas”, detalló la entrevistada, quien precisamente perdió su casa.
Abidán Hernández, otro de los afectados, dijo que a consecuencia de esta situación perdió estufa, cilindro, ropa, láminas, madera, “perdí la ropa de mis hijos, y por miedo a esa noche, ellos ya no se quedan conmigo, más que nada para protegerlos, porque si eso es ahorita, al rato me van a quemar la casa como me han dicho”, señaló.
Son un total de 33 familias las que abandonaron la representación de Andrés Hipólito Requena, quien prometió la regularización del predio, y exigió dinero; sin embargo, no logró ningún avance significativo, por lo cual hoy ha incurrido en acciones violentas para presionarlos a fin de que sigan bajo su yugo.
Los entrevistados manifestaron que la regularización de los terrenos avanza a través de los trámites que hay en Patrimonio del Estado y la intervención de las autoridades locales. “Lo que ellos quieren realmente es que nosotros estemos con ellos, cuando nosotros nos separamos de ellos, porque pedían mucho dinero, y no nos mostraban ningún recibo ni nada, o ningún sello de Patrimonio o de Gobernación”, destacaron los entrevistados.
Gerardo Hernández Álvarez, otro de los afectados, lamentó esta situación, por la cual su patrimonio hoy se perdió, dado que le tumbaron su casa, “hasta la fecha nos amenaza y nos dice, ‘el mismo expresidente, si yo quisiera les hago un desm …, en cualquier momento’; nos han tapado el paso, y las válvulas del agua nos las han cerrado”, indicaron los afectados, quienes lamentaron por otro lado la intervención que la actual administradora del Mercado Poza Rica, Gloria Torres Ordaz, pretendió realizar, para constituirse como enlace entre ellos y la administración municipal, mediante amenazas, para resolver esta situación.
