* Durante su misa de cuerpo presente y mediante un recorrido por el centro de la ciudad
Miguel Bautista
Martínez de la Torre, Ver.- Conteniendo las lágrimas, y muchos de ellos dando rienda suelta a su pérdida, familiares y amigos despidieron la tarde de este miércoles 25 de octubre al joven Alberto Blasco Salcedo, siendo precisamente en su misa de cuerpo presente y antesala de su cremación que exigieron justicia mediante emotivas camisetas con su imagen, pero también con llantos y un recorrido por las principales calles de la ciudad que clamaron porque se castigue a los responsables de su presunto homicidio.
Fue en conocido velatorio que familiares y amigos expresaron a través de sus rostros y leyendas la palabra “Justicia”, que horas después se convertiría en un grito de ayuda ante las autoridades competentes, pues si bien desde su velorio éstas ya resonaban con fuerza entre decenas de ciudadanos martinenses.
En la homilía, fueron los compañeros de Blasco Salcedo, quienes manifestaron la inquietud de realizar una marcha o manifestación para que se actuara con prontitud en este caso, sin embargo, también señalaron que la prioridad era darle cristiana sepultura al compañero, amigo, hijo y hermano, por lo que esto fue sólo una muestra de que parte de la ciudadanía no quiere que quede impune este asesinato a manos de un policía ministerial y su pareja.
Durante el recorrido, el padre del ahora occiso Alberto Blasco Galindo, descendió de una unidad para mostrar una camiseta con la leyenda #todossomosblasco y en la parte posterior la palabra “Justicia”, para dar a entender que se requería el pronto actuar de las autoridades locales y estatales para resolver este caso, así mismo, la señora Ana María Bonilla de Salcedo, abuela del fallecido, también dirigió unas palabras a los medios de comunicación para exigir justicia para su nieto y un castigo ejemplar ante este tipo de situaciones que le arrebataron la vida a un joven con mucho futuro y con grandes ideales, según sus palabras.
Finalmente, durante todo el trayecto a la que sería su última morada, los amigos de Alberto Blasco montaron sus diferentes unidades motoras para acompañar a la caravana que se dirigía al panteón Jardín San Francisco, donde sería cremado y posteriormente entregadas las cenizas a sus familiares para que las resguarden, dando a conocer que no sería la última marcha organizada para seguir presionando a las autoridades, pues de alargarse más este caso insistirían en el hecho de llevar ante la justicia a quienes se presume le arrebataron la vida, con más protestas que se están planeando y podrían darse a conocer en breve, finalizaron.