* Nuevamente con documentos apócrifos siguen pretendiendo estafar a víctimas del municipio
Miguel Bautista
Martínez de la Torre, Ver.- Pese a que en diferentes ocasiones se han detectado falsos verificadores identificados supuestamente con documentos y gafetes de dependencias hacendarias, en Martínez de la Torre esta problemática pareciera no tener fin, y es que los comerciantes insisten en que sus homónimos no deben caer en este tipo de fraudes.
Fernando Pérez González fue quien acudió hasta nuestras oficinas para hacer del conocimiento, que estos supuestos falsos verificadores, están haciendo visitas domiciliarias a los establecimientos de algunas colonias, donde se presentan como miembros de una institución hacendaria para hacer cobros por regularización de sus establecimientos e incluso otras situaciones de diferente índole que no pertenecen al aspecto comercial, los que les causó extrañeza y desconfianza.
Al acudir al Sistema de Administración Tributaria (SAT), pues fueron supuestamente de ahí los papales que les dejaron, les informaron que ellos no envían verificadores a los domicilios o negocios, y que las papeletas presentadas eran de un formato antiguo, por lo que no debían pagar nada, o no estaban ligados a la institución, misma cuestión que se replicó en el palacio municipal, donde dijeron no tener conocimiento del tema en cuestión.
De acuerdo al documento facilitado a nuestro medio informativo, el monto que se cobraba era por la cantidad de 385 pesos, más otros conceptos que se le incluían y que no son del todo legibles sumaban una cantidad superior a los 2 mil pesos, sin embargo, dichos “verificadores” solo obtuvieron la primera cantidad y timaron a la víctima como a tantas otras que se han dejado engañar por estos dizque funcionarios al desconocer las nuevas modalidades de leyes fiscales que regulan a nuestro país.
Finalmente, este ciudadano como otros muchos que han acudido a denunciar esta situación a través de los medios de comunicación exhortan a la ciudadanía para que no se deje sorprender por esta cuestión, pues si bien los presuntos estafadores llevan una historia muy bien formada y hecha, se debe verificar primero la autenticidad de esta documentación antes de entregar dinero alguno a personas que solo pudieran estar constituyendo la comisión de un delito.