* Cimbra el desempleo y crisis en las zonas afectadas por el huracán Franklin
Álvaro Guerrero
Tecolutla, Ver.- Complicado tienen el panorama los palaperos de la zona de Costa Esmeralda, tras la afectación que generó el huracán Franklin hacia sus comercios, pues alrededor de 50 palaperos perdieron sus comercios y la mayoría de ellos no cuentan con el recurso económico para volver a construcción a lo que consideran un patrimonio familiar, señaló Marilú Ochoa Rodríguez, representante de los palaperos de Casitas.
Comentó que, “la situación más difícil para nosotros es que nuestras palapas y nuestros negocios se nos cayeron, para invertir en una palapa cuesta, mucho es la inversión que se da, porque nosotros no podemos poner láminas a pie de la playa, en la orilla no podemos por los aires tan fuertes, y la mayor protección que podemos tener para que nos afectemos en dañar es la palma”.
Precisó que por lo menos para levantar una palapa les cuesta alrededor de 30 mil pesos, y aquellos que tenían una mayor extensión les costará aproximadamente como 95 mil pesos, mientras que las pequeñas hechas de palma estiman que les salen como en mil pesos cada una, aunado al traslado del material y del personal que va a colocar las instalaciones.
Otro de los problemas que deben enfrentar son las cuentas que se acumulan en las mesas, donde la CFE y Telmex van a esperar hasta que se tenga que recuperar económicamente, lo cual es un duro golpe más que vaticinan pronto les va a llegar, y algunos no cuentan con el recurso para solventar el pago de estos servicios públicos.
“Tenemos gente desempleada, tenemos gastos que cubrir, luz, agua, seguro social, sólo en esta región son alrededor de 40 palaperos, en la zona se quedaron sin nada, algunos comenzaron a levantar, hay casos donde algunos vivían en su negocio y pues hasta sus cosas personales se perdieron”, expresó.
Finalmente, dijo que los palaperos lo que requieren son apoyos económicos o financiamientos a bajo costo de comisión, ya que la despensa no beneficia a todas las familias que dependen nada más de este sector, del cual visualizan será hasta diciembre cuando empiecen a mejorar su situación.