* El nepotismo y tráfico de influencias del coordinador distrital, impuso y dispuso de cargos y recursos en beneficio de familiares y amigos
* Exigen investigaciones, auditoría y sanciones
Sergio Guillén F.
Martínez de la Torre, Ver.- La semana pasada, después que el Consejo General del Instituto Nacional Electoral removiera de su cargo a Jorge Alberto Hernández y Hernández de su cargo de Consejero Electoral del OPLE a nivel estatal, por nepotismo al ocultar su parentesco para designar a Nancy Popo Pale como secretaria general del Consejo Distrital XVIII del organismo, partidos políticos y observadores electorales exigen al INE y al Consejo General del OPLE, se investigue el nepotismo y tráfico de influencias en el VII Consejo Distrital del OPLE con sede en Martínez de la Torre, donde se convirtió al árbitro electoral en un negocio familiar y de amigos.
Bajo la complicidad del Consejo General del OPLE, quien es coordinador distrital del OPLE en este distrito, el licenciado Alberto Gómez Parra, responsable del manejo de los consejos municipales de Tlapacoyan, San Rafael, Gutiérrez Zamora, Tecolutla y Martínez de la Torre, utilizó sus influencias y alto cargo para poner e imponer a amigos y familiares en los consejos municipales.
Ejemplo de ello, es la designación de su esposa identificada como Lourdes, originaria de Misantla, a quien nombró cono Profesional Administrativo del Consejo Distrital del OPLE, encargada de manejar los recursos financieros, materiales y humanos, dándole presuntamente un manejo a su total albedrío o para beneficio personal.
Alberto Gómez Parra, también logró colocar a su hijo mayor identificado como Alberto Gómez, como Profesional Informático en el distrito de Misantla, específicamente en el consejo local del OPLE en el municipio de Naolinco, esto presuntamente bajo la anuencia del ahora ex consejero del Consejo General, Jorge Hernández y Hernández, removido por nepotismo y que está impedido ahora para ocupar cualquier cargo en el servicio público relacionado con temas electorales.
Otra irregularidad en la que Gómez Parra presuntamente incurrió, fue en la designación de su amigo Jesús Martínez Mota como secretario general del Consejo Municipal del OPLE en Martínez de la Torre, quien a su vez puso a su hijo como Profesional Informático, responsable del Programa de Resultados Preliminares en el OPLE en Martínez de la Torre.
Además, la presidenta del Consejo Municipal en este mismo municipio, María Eloísa Sosa Zayas, quien también es amiga personal de Alberto Gómez, habría incluido a una de sus parientas como su asesora en el pasado Proceso Electoral. En este mismo consejo, otro de los amigos recomendados del coordinador, fue un hombre identificado como José Lucas, quien fue puesto como Profesional Informático del OPLE Distrital, esta persona es trabajador del ISSSTE en Poza Rica y según los representantes de partido, sólo trabajaba algunos días por semana, pues tenía dos empleos al mismo tiempo.
Otro caso de nepotismo, es el del recién destituido como Presidente del Consejo Municipal del OPLE de Tlapacoyan, Iván Cuevas Cobos, señalado por ser el autor de graves anomalías durante el Proceso Electoral en ese municipio, criticado por su falta de preparación académica y quien con la anuencia de su amigo Alberto Gómez, logró poner a su hijo identificado como Iván Cuevas como Secretario General del OPLE en el municipio de San Rafael.
Otro caso, aunque ya ajeno al Consejo Distrital VII de Martínez de la Torre, es el del Consejo Local en Atzalan, donde el presidente del organismo puso a su esposa como Secretaria General del mismo y que días antes de las elecciones del 4 de junio, fue evidenciado por los representantes de partidos políticos.
Y es que el nepotismo y tráfico de influencias en el OPLE, hicieron que el Proceso Electoral se convirtiera en un jugoso negocio para familias y amigos, la mayoría identificada con partidos políticos que generaron incertidumbre sobre los resultados electorales, muchas veces evidenciado por los otros partidos políticos.
El caso del coordinador distrital del OPLE, Alberto Gómez Parra, quien colocó a familiares y amigos en importantes cargos, siguen gastando y haciendo uso de recursos públicos asignados por el Consejo General del OPLE, vehículos y camionetas oficiales son utilizadas para uso personal y con combustible pagado por el erario público, con sueldos elevados y con todo el poder del árbitro electoral en las manos.
Ante ello, los partidos políticos exigen al Consejo General del INE y del OPLE, investigar y sancionar estos delitos, pues además de enriquecer familias, generan incertidumbre sobre el manejo de los recursos y resultados de la pasada contienda electoral, funcionarios que deberían estar en la cárcel e impedidos para cualquier cargo en la función pública. Por lo que también exigen una auditoría a los órganos municipales y Consejo Distrital del OPLE.