Brenda Pérez Aguilar
Martínez de la Torre, Ver.- Para las mujeres del campo tanto el Día Internacional de la Mujer como el 10 de mayo, son fechas que la mayoría de las veces pasan desapercibidas, debido a que la situación económica que viven en las comunidades de las zonas marginadas es muy crítica, lamentó la presidenta de la asociación civil Incorporación de la Mujer al Desarrollo Veracruzano (IMDVER) Rosy Sánchez Ramírez.
“Para las mujeres del campo un 10 de mayo, Día de las Madres, es un día como cualquier otro, porque se tienen que levantar a las 5:00 o 6:00 de la mañana para irse a cortar limón, prepararles el lonche al marido, hacerle las tortillas para que se vayan a trabajar para ganarse 100 pesos al día”, destacó.
Sánchez Ramírez, subrayó que gracias a que han caminado y recorrido comunidades de los diferentes municipios, se puedan dar cuenta de las condiciones de vida de muchas mujeres.
Y es que dijo han encontrado casos de señoras que son golpeadas por los maridos alcohólicos e irresponsables, otras que tienen que trabajar para sacar adelante a sus hijos, porque el marido se fue en busca del sueño americano y ya no regresaron.
“Son historias tristes desde su infancia y adolescencia, porque como se casan con la gente de sus mismos ranchos, comunidades, se sigue una cadena interminable, porque hay tanta desigualdad y a veces nos sentimos tan impotentes de que no poder hacer más por ellas”, enfatizó.
“El mejor regalo para las mujeres de la sierra sería no salir a trabajar, quedarse en su casa, descansar, pero sobre todo que tengan las mismas oportunidades para sacar a sus hijos adelante, tener una vida digna y no vivir de migajas”, concluyó.
