* Trabajan para disminuir los decesos
Brenda Pérez Aguilar
Martínez de la Torre, Ver.- Debido a la injusticia social que sufren las mujeres en todo el mundo, principalmente en países en vías de desarrollo, Juvenal Carballo Preza, responsable de Salud Reproductiva en la Jurisdicción Sanitaria número IV, dijo que en las muertes maternas intervienen varios factores, como la educación, salud, la accesibilidad de los caminos, entre otros factores más.
“Si una mujer con hemorragia se encuentra a una distancia de 20 kilómetros de un hospital, pero si a esto le agregamos un camino de terracería en pésimo estado, se podría hacer hasta dos horas de camino y la paciente no esperará para llegar al hospital, porque el riesgo de muerte aumenta un 90%, lo que habla de una injusticia social e inequidad de género”, indicó.
Y es que dijo, las mujeres tienen muchos derechos a la planificación familiar, pueden decidir el número de hijos que desean tener, pero si el marido no las deja que se hagan su salpingoclasia, misma que es una urgencia administrativa.
“Hemos visto casos de señoras que han solicitado su salpingoclasia, pero el marido no las dejó que se la realizaran y al siguiente embarazo fallecen, porque tenían preeclampsia, por lo que la salpingoclasia sí es una urgencia”, citó el galeno.
En el primer nivel, los médicos tratan de dar la atención y hacen la referencia al nivel que corresponde, pero si el nivel que corresponde posiblemente no tenga todos los medios para atender una embarazada, por ello se tiene que ver que estén acorde a sus necesidades.
“A veces nos fallan las estructuras hospitalarias, los médicos ginecobstetras, pero esperamos que se corrijan las carencias en los hospitales, se refuercen con la estructura de tanto hospital como de física”, refirió.
Pero definitivamente cuando hay una buena voluntad política, todo mejora, aunque a nivel nacional las muertes maternas han bajado mucho, porque en años anteriores fallecían alrededor de mil 400 mujeres al año y ahora solo 800, pero todavía se tiene que ver por qué siguen falleciendo.
A nivel jurisdiccional se bajó la mortalidad en un 50%, de tal manera que en el 2014 hubo cero muertes maternas, en el 2015 solo una, pero en el 2016 se disparó la cifra y en lo que va de este año no ha habido ninguna y así esperan continuar.
“Las muertes maternas no tienen palabra de honor, porque si a una señora se le complica su embarazo y no lleva control prenatal o incluso nunca fue con una partera, tiene más del 80% de posibilidades de que fallezca en el hospital”, concluyó.