Rodrigo Barranco. Boca del Río, Ver. El alcalde de San Andrés Tuxtla, Manuel Rosendo Pelayo, informó que ante el adeudo que el gobierno estatal tiene con su administración analiza recortar la nómina para el 2017.
En entrevista, a su visita a Boca del Río, dijo que dialogará con los trabajadores de confianza pues otra opción es bajar sus salarios y que nadie sea despedido.
En edil confió en que la situación se logre regular ya que cuenta con una buena relación con el gobernador electo, Miguel Ángel Yunes Linares, de quien espera mande los depósitos de las partidas federales en tiempo y forma.
“Nosotros tenemos contemplado ya, no por esta situación, lo tenemos contemplado ya en este tercer año, bajar la nómina de gasto corriente porque ya tenemos que cerrar administrativamente el otro año y esto era de manera normal, el tema, el procedimiento que ya lo teníamos contemplado”.
El alcalde recordó que en la actualidad tienen unas 530 plazas laborales de las que reducirán alrededor del 15 por ciento, solo de los empleados de confianza.
“Primero vamos a hablar con ellos porque tenemos que cuidar el tema social, que se vea ese interés de un servidor de llegar acuerdos con ellos, porque el gasto corriente de cada administración de asfixia al final de cada administración y más con este tipo de acciones, cuando no hemos tenido los recursos en tiempo y forma”.
Explicó que su carga presupuestaria por la nómina, de manera mensual, es de los 5 millones de pesos y necesitan que quede entre 3 millones o tres millones y medio.