* Mientras que los campesinos siguen esperando que su situación mejore
Facundo Bartolo Salazar
Martínez de la Torre, Ver.- Los empresarios del sector citrícola acaparan los apoyos de las dependencias gubernamentales, mientras los pequeños productores siguen esperando mejoría en su situación, en la que cada vez es más difícil sobrevivir, con insumos caros y bajos precios para la fruta, con el mercado controlado por los propios empacadores, señaló Bertoldo Zamítez Mendoza, delegado de citricultores de San Rafael.
El entrevistado lamentó que “el mismo dirigente de los citricultores, Nicolás Murrieta, nos ha dado la espalda a los productores, porque él es empresario y al parecer aprovecha cuanto apoyo llega, al igual que otros, estando muy cercano a funcionarios de las dependencias que los favorecen constantemente”.
Es por ello que, insistió, no es justo que los grandes inversionistas se queden con todos los recursos para incrementar sus riquezas, mientras que los pequeños productores apenas obtienen lo necesario para subsistir.
Aunado a lo anterior, Zamítez Mendoza indicó que los grandes empacadores tienen huertas citrícolas en el sur del país, de tal manera que cuando así conviene a sus intereses desploman los precios del limón persa a nivel local, introduciendo grandes cantidades de la fruta a la subasta, viéndose obligados los productores a recibir pagos irrisorios.
Dada la situación, el declarante consideró necesario hacer un llamado a las dependencias gubernamentales para que tengan a bien cambiar las políticas en lo que a apoyos se refiere, pues los citricultores ya no soportan más esa situación.
Consideró que los pequeños productores deberían contar con oportunidades para gestionar apoyos concretos, que les permitan ser más productivos y de esa manera incrementar sus ingresos. Pero expresó que para ello se requiere impulsar un nuevo liderazgo entre los citricultores, pero que no tengan compromisos en las grandes élites empresariales que solamente contribuyen a empobrecer más al campo. Dijo que eso implica relevar a Murrieta Espinoza de un cargo que ya debió dejar desde hace años y que presuntamente ha usado solo para su beneficio personal y de sus allegados.