Por el crecimiento exponencial de barras y cafeterías de especialidad en México, el consumo per cápita pasó de 700 gramos a mil 400 gramos por persona en las últimas dos décadas, generando un segmento de oportunidad para los productores mexicanos, incluso, resulta hasta más atractivo que exportar.
“En los últimos años, aparecieron hasta 50 mil cafeterías y barras de café en la república, unas 2 mil 500 corresponden a franquicias internacionales o nacionales, el resto son marcas locales que están motivando un creciente consumo del aromático entre los jóvenes. Al año, se registra un alza del 26.5 por ciento, sin embargo, se tienen problemas en el abasto de un buen grano”, afirmó Arturo Hernández, director de la Asociación Mexicana de Cafés y Cafeterías de Especialidades (Amcce).
El mercado de cafeterías de especialidad registra un crecimiento importante, se ha convertido en el sector con mayor apertura de unidades de negocios en el país, el consumo interno representa 2.1 millones de sacos de los 3.4 millones producidos el año pasado, en gran medida porque este concepto atrae a la población juvenil, la cual se ha convertido en más exigente respecto a la calidad del producto en taza; eso permite al productor tener un mercado doméstico que le ayudé a colocar su producto con mayor facilidad.