* San Rafael y Tlapacoyan necesitan la reactivación de estos rubros para su crecimiento económico
Miguel Bautista
Directivas de los mercados de los municipios de San Rafael y Tlapacoyan, siguen lamentando que a las autoridades no les interesen los problemas que tienen, pues en este sentido, estos proyectos ya se han estancado o en el peor de los casos no se les ha dado el correcto apoyo para que funcionen.
Mercado de San Rafael, sin difusión
Son los locatarios del municipio de San Rafael, quienes señalan que a pesar de que cuentan con las instalaciones del mercado municipal, este no tiene promoción alguna, e incluso los locatarios han tenido que salirse de este lugar para pagar una renta altísima en el centro de la ciudad, por el abandono en que se encuentran.
Es un problema que lleva ya algunos años refieren, y que hasta el momento ninguna administración ha sido capaz de regalarles ni siquiera un bote de pintura o promocionar este mercado que aseguran durante muchos años fue el principal motor de la economía de este municipio, por lo que suponen que ahora que las empresas abarroteras y de supermercados que han llegado a la ciudad le dejen mejores dividendos a sus autoridades para que estos no volteen los ojos a los locatarios y los haya hecho a un lado.
En Tlapacoyan, solo les dan largas
En Tlapacoyan la situación es peor, pues a pesar de que hace algunos años un incendio consumiera el mercado municipal de Tlapacoyan, no se han podido destrabar los recursos para ponerlo en funciones nuevamente, siendo el patronato del mercado municipal el que señalara directamente a Víctor Apolinar y la Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas de mantener hermetismo en este caso para no hacerse cargo de esta problemática.
Así mismo exponen, ambas directivas coinciden en que la situación es desesperante, e incluso se da una mala imagen de la ciudad, pues cada turista o visitante que arriba al municipio lo primero que busca es el mercado municipal, razón por la que instan a sus autoridades a presionar y hacer gestión de manera que la solución llegue a ambas partes para una mejor y sana economía de los locatarios que hoy se encuentran prácticamente en bancarrota.