* Tesorero busca ser alcalde y se agencia entrega de obras
* Ya quiere llegar a ser titular cuando es aguador
Atzalan, Ver.- Después del derroche excesivo de recursos en el municipio de Atzalan en vicios, fiestas privadas, regalos para funcionarios de Gobierno del Estado y senadores para permanecer en el agrado y la aceptación del círculo político estatal, ahora es el actual tesorero Rafael Herrera Villar quien sigue los pasos de Orlando Bocarando Sánchez.
Esto debido a que ha iniciado una serie de eventos anticipados de campaña hacia su persona, aprovechando los tiempos electorales ya busca aparecer en cualquier evento político y público.
Tal es el caso del banderazo de inicio de obra de drenaje que realizó recientemente, a pesar de que la ley electoral lo impide, hace uso de sus artimañas y derroches para evitar sanciones de la autoridad electoral, debido a que busca promover su imagen personal.
Rafael Herrera Villar quien llegó a la administración de Bocarando Sánchez como un sumiso empleado más, quien con el paso de los días y meses fue tomando el control de todo lo económico al grado de ser quien da la última palabra en los gastos corrientes de la administración.
Al grado de llegar a adeudarles varias quincenas a los empleados de confianza de la actual administración y a quienes los engaña con pagos mínimos de su sueldo aprovechándose de la necesidad de muchos.
Mientras que en otros casos no les paga y tienen que dejar sus empleados por no tener un sueldo con el que sostengan a sus familias, mientras que los sueldos siguen saliendo en las nóminas de la administración para que este dinero sea desviado a las bolsas del tesorero y del alcalde.
Y dinero de cual ahora hace uso para salir a prometer en las comunidades de Atzalan, porque prometer no empobrece, para ganar simpatizantes y con ello tener sueños guajiros de gobernar Atzalan para pagarle el favor a Orlando Bocarando Sánchez de ponerlo donde no, mas no de darle trabajo.
Recordemos que tras Herrera Villar hay una serie de quejas por autoritarismo, abuso de poder e incluso retención de salarios de empleados y exempleados de la administración municipal de Atzalan.
