7 de Noviembre de 2024
Director Editorial Lic. Rafael Melendez | Director General - Dr. Rubén Pabello Rojas

Declaran en abandono a la embarcación coreana Mu Du Bong

El Diario Oficial de la Federación dio a conocer que la embarcación originaria de Corea del Norte, “Mu Du Bong”, atracada en el puerto de Tuxpan, fue declarada en abandono a favor del estado mexicano.

Su transferencia correrá a cargo del Servicio de Administración y Enajenación de Bienes, entidad que se encargará de su destrucción, debido a que de acuerdo a las leyes marítimas internacionales, un buque sin tripulación y sin que nadie lo comande, se convierte en un peligro para la zona ante la posibilidad de un accidente o colisión.

Cabe recordar que esta embarcación causó graves daños al sistema arrecifal ubicado frente al puerto de Tuxpan, el pasado 14 de julio de 2014. 

La Organización de las Naciones Unidas (ONU), el 28 de julio de ese mismo año, a través de su Consejo de Seguridad, señaló que el buque Mu Du Bong era considerado un activo de la empresa de la República de Corea del Norte “Ocean Maritime Management Company Limited”.

Dicha compañía se encuentra incluida en la lista de personas y entidades sujetas a prohibición de viaje y congelación de activos financieros por el Comité de Sanciones 1718, del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, por tanto la Capitanía de Puerto, en atención a la solicitud de la ONU, procedió a su retención. 

El Mu Du Bong al momento del atracó traía a bordo 33 tripulantes que posteriormente y derivado del vencimiento de sus documentos migratorios, el Instituto Nacional de Migración (INAMI), llevó a cabo su repatriación, asistida de la totalidad de la tripulación de dicho buque, concluyéndola el 14 de julio de 2015.

Una vez que la embarcación quedó sin tripulación en julio del 2015, la Capitanía de Puerto la puso en estado de "amarre", de acuerdo a las leyes de navegación internacional.

Sin embargo, el que dicha embarcación no tenga tripulación a bordo, ni capitán que comande, se convierte en un peligro, no solo para sí mismo, sino para las demás embarcaciones, y para las instalaciones del puerto, principalmente por los ductos de Pemex que atraviesan el río Tuxpan, ya que en caso de emergencia, no existe nadie que pueda maniobrar para evitar alguna colisión. 

Derivado de esto, el gobierno federal se hizo cargo del buque, a través del Servicio de Administración y Enajenación de Bienes, para su destrucción.