* El productor invertiría por lo menos 15 mil pesos para comprar mil esquejes de la planta aunados a otros gastos
Facundo Bartolo Salazar
Hasta 100 mil pesos costaría iniciar un plantío de vainilla al tomar en cuenta que actualmente, un esqueje de la planta cuesta alrededor de 15 pesos, de tal manera que el productor invertiría 15 mil pesos para sembrar mil plantas en un cuarto de hectárea, sumándole a ello el costo de los tutores, mano de obra y demás requerimientos del cultivo, precisó Miguel Ángel Acosta Carmona, en su carácter de productor y artesano de la vainilla.
Destacó que “por los altos costos que conlleva, el cultivo de la vainilla requiere de impulso gubernamental, a través de créditos u otros mecanismos para que dicha actividad no desaparezca por falta de promoción e impulso”.
Sostuvo que aun cuando la vainilla está a punto de desaparecer, se puede seguir adelante con esa actividad, pero se requieren recursos de gobierno para extender las plantaciones, pues definitivamente hay productores que pueden cultivarla, pero necesitan de un apoyo inicial. Destacó que a la par de los recursos debe haber asesoría, pues de lo contrario sería tirar dinero a la basura.
Insistió en que el cultivo de la vainilla es caro, y también el producto en sí lo es, pero se trata de algo redituable que se puede llevar a cabo más fácil de lo que se hacía antes logrando mayor producción, pero desgraciadamente cuando mandan asesores, estos son gente de escritorio, y realmente ellos no conocen del cultivo, siendo esa la causa del fracaso de muchos productores.
Mencionó que otro problema con la orquidácea es que falta mucha promoción para la vainilla natural, lo cual resulta evidente principalmente en Papantla, que siendo considerada la cuna de ese producto, se encuentra saturada de extractos artificiales, principalmente los que contienen cumarina, una sustancia que puede causar cáncer.
Reiteró entonces que el gobierno debería apoyar el cultivo y además la comercialización de la vainilla natural que es más saludable, y por lo tanto debería estar en la mesa de los consumidores de manera preponderante, en comparación con los extractos artificiales.
Lamentó también que los vainilleros no sean tomados en cuenta en la organización de eventos para promocionar el producto, pese a que ellos siempre han trabajado para darlo a conocer, conjuntamente con sus beneficios principalmente para la salud.
Apuntó que el producto puede ayudar para tratar la diabetes, un mal que ocasiona serios estragos en la salud de las personas, situación que debería motivar a los gobiernos a brindar opciones, sobre todo naturales, para mitigar los efectos de ese tipo de padecimientos.
