* Directiva y pseudolíderes han infundado pánico por posibles acciones violentas
Miguel Bautista
Después de correrse el rumor de un desalojo con lujo de violencia por parte de la actual directiva del Predio Río Chico, algunas familias de ese lugar, entre ellos, mujeres, niños y personas de la tercera edad acudieron ante la autoridad municipal para solicitar su intervención en dicho conflicto, pues afirman que es un patrimonio que ya ha sido pagado en varias ocasiones, muestra de ello es que llevan más de ocho años haciendo aportaciones para mejorar el lugar.
Al dialogar con el alcalde Rolando Olivares, los colonos fueron claros al señalar al propietario de este lugar Armando Aiza Ávalos como una persona que se ha negado a dialogar con los mismos, pues ahora apoya a acierto grupo que es la directiva del lugar, pero como se ha explicado en ediciones anteriores solo son puestos en dicho cargo por cortos lapsos para la venta de los terrenos sin cumplir, por lo que el ciclo se repite con cada directiva, lo cual ha generado hartazgo entre los posesionarios.
En este sentido, se escuchó decir incluso que estarían dispuestos a levantar alguna denuncia formal contra este individuo que mediante rumores o a través de sus directivas se ha encargado de hacer llegar voces de desalojos violentos, por lo que las familias que habitan el predio están temerosas de que exista algún enfrentamiento, solicitando a las autoridades que mediante los jurídicos de ambas partes se dialogue y se llegue a un acuerdo con el propietario, dejando de lado a las directivas, líderes de colonias e incluso apoderados legales.
No conforme con todas estas situaciones, lo más difícil para las familias que si habitan en este asentamiento humano es que según el grupo disidente han empezado a censar de algún modo a las familias que no habitan ahí para entregar terrenos que ya han sido pagados en diversas ocasiones, por lo que a esto se suma el temor de que no pueden dejar su casa sola por miedo a que gente externa o nuevos colonos mediante engaños entren a ellas en cualquier momento, algunos incluso se han visto en la necesidad de faltar al trabajo, aseguran.
En la opinión de una entrevistada, esperan que las autoridades puedan hacer algo o citar a dialogar al propietario para poner orden, pues ya no quieren más tratos con pseudolíderes o directivas y que las negociaciones venideras o posteriores se hagan única y exclusivamente con el dueño, estando presente y bajo notario público para que no haya lugar a trampas o más fraudes, reiteraron.