5 de Noviembre de 2024
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Mtz.- “Nunca haremos caldo gordo a gallinas flacas”: G. Zapata

* Parra Marín se ve obligado a utilizar personas de relleno, pues no tiene capacidad de convocatoria

Facundo Bartolo Salazar

“Nunca haremos caldo gordo a gallinas flacas”, afirmó Gerardo Zapata González, dirigente regional de la CROC, quien de esa manera dejó en claro que ni él ni su gente se afiliarán a la CROC “patito”, tristemente representada por Pedro Parra Marín, quien insiste en que es el único representante de esa organización, aunque es un dizque líder que no es conocido ni en su casa, añadió el entrevistado.

Zapata González comentó que “sería verdaderamente ridículo y absurdo que mis representados y yo vayamos corriendo a sumarnos a una organización que ni siquiera tiene bases sólidas, ni mucho menos tiene la gente, situación que es muy diferente en la auténtica CROC que lleva más de 40 años atendiendo las inquietudes y necesidades de los afiliados en sus diferentes actividades”. Insistió en que Parra Marín lastimosamente se ve obligado a conseguir personas de relleno para poder tener quorum en sus reuniones, siendo muy claro que carece totalmente de capacidad de convocatoria.

Y pese a que dijo respetar a Daniel Cano por su trayectoria como dirigente de la CTM, lamentó que él sí haya acudido a “hacer el caldo gordo a gallinas flacas”, quizá en busca de respaldo o de cobijo, sabiendo que ya tiene encima su etapa de decadencia. En contraparte, sostuvo que la CROC continuará trabajando con una conciencia clara de que es una organización debidamente reconocida, tanto entre sus propios afiliados, como ante las diferentes instancias oficiales.

Dijo estar despreocupado por las acciones que emprenda la CROC “patito”, puesto que le falta mucho para consolidarse debidamente y ser un respaldo real para quienes en su momento toquen sus puertas en busca de apoyo. Reiteró que el trabajo de la auténtica CROC ha quedado demostrado a través de los años, y definitivamente, ninguna organización oportunista vendrá a echar abajo los logros ya obtenidos, sobre todo en cuanto a reconocimiento y movilidad, que resultan muy importantes para defender mejor los intereses de los representados.