Coatzacoalcos, Ver.
El dirigente de la Unión General de Obreros y Campesinos de México (Ugocm) en Coatzacoalcos, Mario Clairgue Viveros, acusó al delegado de Tránsito en la localidad, Fredy Escobar Huervo, de orquestar junto con su hermano Rubén una agresión en contra de 20 choferes que cubren la ruta Mapachapa-Minatitlán, concesionarios y usuarios durante el fin de semana.
En rueda de prensa, el líder de la Ugocm dijo que los hechos ocurrieron ayer domingo a las seis de la mañana en Chinameca.
“Un grupo de delincuentes encabezados por el hermano del delegado de aquí de Coatzacoalcos Rubén Escobar Huervo y unos dirigentes de la línea Santa Clara.
Llegaron a las seis de la mañana con 200 porros más o menos, 20 camiones ése grupo de delincuentes encabezados por Rubén Escobar Huervo, golpearon a choferes y sacaron a 20 carros de la Ugocm de la ruta, la intención era ésa, los agarraron a las seis de la mañana”, narró.
Clairgue Viveros explicó que la intención de los agresores, que pertenecen a la cooperativa de transporte Santa Clara, es quedarse con la ruta Mapachapa-Minatitlán, luego de que se les acabara el trabajo en la obra del complejo Etileno XXI.
Señaló que tras la agresión hubo por lo menos cuatro personas heridas, por lo que se formuló una denuncia penal en contra de quien resulte responsable ante la Procuraduría General de la República (PGR), para lo que aportaron fotografías y videos de lo que consideraron delincuencia organizada.
El dirigente de la Ugocm dijo que detrás de esta situación está el delegado de Tránsito en Coatzacoalcos, Fredy Escobar Huervo, quien por medio de su hermano tiene intereses en materia de las rutas de pasaje en la zona sur de la entidad. Incluso, recordó que en fechas pasados pidió su renuncia por tráfico de influencias.
A consecuencia de lo anterior, pidió la intervención de la Secretaría de Gobernación y de Seguridad Pública (SSP), pues son las instancias que toleran los conflictos entre transportistas, aunque en este caso circulan sobre carreteras federales.
Precisó que la ruta en disputa había sido operada durante años por la Ugocm y ahora la cooperativa Santa Clara pretende quitárselas por medio de la fuerza.