Por María Elena Ferral
Papantla, Ver.- La necesidad de alcanzar la perfección en cuanto a la conducción de los procesos judiciales para la aplicación de la justicia, es primordial para la sociedad hoy en día, pero lo es aún más para los sectores vulnerables, en cuanto a derecho se refiere, como es el caso de la población indígena, sobre todo para los que aún hablan su lengua nativa, les resulta difícil afrontar el ambiente jurídico, ya que carecen de traductores que los ayuden a comprender los procedimientos y preceptos legales.
De acuerdo con Jerónimo Simbrón Cruz, traductor indígena, “actualmente en el Totonacapan existe un marcado déficit de traductores que puedan asistir a los indígenas totonacas en los procesos judiciales especialmente, situación que es muy grave debido a que para ellos es sinónimo de un encarcelamiento seguro, porque muchas veces los expedientes están mal integrados porque no saben ni lo que declararon, ni lo que firmaron, pues aunado a ello, está el hecho de que muchos ni siquiera saben leer ni escribir”.
La falta de traductores se refleja no sólo en los tribunales, ni en la procuración y aplicación de la justicia, sino también en diversas dependencias como la SEDESOL, dificultándose la entrega de diversos apoyos, por ello es que anteriormente se contaba con 120 traductores y ahora se desconoce qué va a pasar, porque como se sabe, se llevaron a la ciudad de Martínez de la Torre las oficinas de la Secretaría de Desarrollo Social.
Por lo que sigue resultando importante engrosar el rubro de traductores que asistan a la población indígena, durante los procesos legales, especialmente judiciales, sobre todo ahora que vendrá la aplicación de los Juicios Orales, lo cual incrementará el obstáculo, pues ya de por sí, se cometen injusticias, por lo que es necesaria la presencia de traductores que coadyuven a la defensa de este sector vulnerable en el ámbito del derecho.
