* Por lo menos cien millones de pesos pendientes en apoyos para la zona citrícola del Totonacapan, incluyendo Martínez
Facundo Bartolo Salazar
Es urgente pelear los recursos que son para los productores, mismos que para la zona citrícola del Totonacapan, sumarían en total 100 millones de pesos que no han sido liberados por la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan), aseveró Bertoldo Zamítez Mendoza, integrante de la Unión de Ejidos de San Rafael, quien mencionó que los diputados buscarán intervenir ante la citada dependencia para lograr que ese dinero que ya estaba programado realmente beneficie a los hombres del campo.
Comentó al respecto “ojalá y sea verdad que ahora si los legisladores realmente vuelvan su mirada hacia los productores, quienes en todo el estado de Veracruz ya deberían haber recibido en apoyos 200 millones de pesos, pero resulta que solamente se han entregado 20, y están pendientes los restantes 180 millones que serían de gran ayuda, en la situación de crisis que vive el sector campesino”.
Apuntó que especialmente la zona citrícola es constantemente afectada por los bajos precios de la fruta y en contraparte los altos costos de los insumos que se utilizan en las huertas, por lo que opinó, los productores deben alzar la voz y en su caso exigir los apoyos a los que deberían tener acceso.
Asimismo, comentó que los campesinos deben tener mayores oportunidades para invertir en sus huertas, con la finalidad de sobrevivir en la actividad citrícola, misma que es la única viable por el momento en estas tierras. Confió en que los diputados entreguen buenas cuentas a los productores, pues lamentó que a través de los tiempos, el sector campesino solamente ha sido fábrica de votos en cada elección, en la que, al llegar al poder el candidato simplemente se olvida, de tal manera que los grandes recursos gubernamentales se utilizan para campañas políticas, en lugar de aplicarlos al sector productivo.
Comentó que los campesinos deberían estar mejor organizados, de tal manera que pudiesen contar con la fuerza suficiente para exigir a sus líderes y a las dependencias de gobierno los recursos que incluso estando programados para el campo, nunca aterrizan para bien de ese sector.