* Afectará a todos de diferente manera, afirman profesionistas
Miguel Bautista
Luego del anuncio de la homologación salarial en las zonas A y B de este país, ciudadanos aseguran que se trata de un engaño fabricado para empobrecer aún más al país, esto habría de entrar en vigor a partir del primero de octubre, lo que según inconformes resulta en mera fantasía, pues en lugar de homologar dichos preceptos se deberían haber incrementado, pues es de entenderse que en algunas zonas se gaste más que en otras.
Integrantes del grupo disidente de la defensa para la seguridad social en el municipio, adelantaron que dentro de este margen también se convino el establecimiento de un solo salario profesional en toda la República, esto con relación a cada una de las ocupaciones comprendidas en el listado de profesiones, oficios y trabajos especiales, conforme lo establece el artículo 570 de la Ley Federal del Trabajo.
Con lo que según ellos, los diputados y senadores se estarían metiendo en los sueldos de personal altamente capacitado, pues consideran injusto que una profesión que dura por lo menos 10 años de carrera profesional sean establecidos en mutuo acuerdo, mientras que la clase política, o algunos de ellos con escasa preparación académica obtengan salarios ostentosos.
Agregó que el aumento de apenas 1.82 en relación al anterior sistema de cobro salarial resulta bastante ridículo, pues con estas percepciones apenas alcanzarían nuevamente para cubrir las necesidades básicas o subsistencias de las familias que viven en pobreza o pobreza extrema.
Consideró que de acuerdo a su profesión ha tenido la oportunidad de viajar a otros estados de la República y en algunos lugares de nuestro país como la zona centro, el modo de vida es aún más caro que el de la zona sur, por ser zonas de turismo, lo que la homologación de salarios en vez de beneficiar a todos perjudicaría más a algunos.
Dijo que la devaluación del peso frente al dólar dejaría indefensos a los mexicanos en cuanto al nuevo sistema que se pretende implementar en el país, pues los aumentos a la canasta básica son cosa de todos los días y hay quienes únicamente subsisten con esta percepción, sin obtener otros ingresos extras.
Expresó que desafortunadamente al menos un 60% de la mano de obra trabajadora del país gana el salario mínimo o menos diariamente, lo cual genera un problema bastante serio entre las personas, ya que muchas de ellas tienen que dividir sus ingresos entre varios habitantes de un mismo domicilio.
Aun y cuando se desproporcionan los sueldos de funcionarios con lo de la población común, se tiene cada vez un mayor número de empleos pero mal pagados y con un aumento reiterativo de universitarios en busca de espacios laborales, pues muchas carreras actualmente se encuentran sobre saturadas en el mercado, por lo que los jóvenes terminan trabajando en empleos ajenos a su profesión.
