* Quejas ya son cosa de todos los días en este recinto de “salud”
Miguel Bautista
Negarse a recibir pacientes, quejas por malos tratos y deficiente atención hospitalaria, ya son cosa de todos los días en el Hospital Civil de Martínez de la Torre, uno de los peores calificados desde que comenzara su administración la doctora Janeth Galindo al frente de mismo, pues dichos aspectos se han potencializado, al grado de hacerse insoportable el querer ocultar esa situación que día a día dan a conocer pacientes de toda índole.
En esta ocasión fue el señor, Arturo Luévano Salas, de oficio taxista, con domicilio en una comunidad del municipio de San Rafael, quien relató que apenas el pasado 10 de agosto alrededor de la 01:50 horas trasladó a su pequeño Ángel Tadeo de tan solo 5 años a este nosocomio, pues sufre de hidrocefalia, razón por la cual tiene cita abierta en cualquier institución pública del país.
Lamentablemente, aseguró haberse encontrado con la sorpresa de que el médico que debía estar laborando en ese turno no se encontraba y en su lugar se encontraba (o se cree que durmiendo) una residente (practicante) de pediatría, la cual negó tajantemente la atención al pequeño, acusándola incluso de discriminación, pues se negó en todo momento a auscultarlo, dando como respuesta que no tenía entre sus funciones otorgar ese tipo de consultas, dándose media vuelta para dejarlos abandonados a su suerte.´
Cuenta que afortunadamente dentro del nosocomio también existe otro personal de salud que toma en cuenta todas las necesidades de la población usuaria y con ayuda de otro galeno pudo ser remitido al área de cuidados para tomar unas placas, y aminorar un poco el sufrimiento de su vástago.
Dijo que la travesía no paró ahí, pues tuvieron que trasladar a su pequeño a otra institución de la ciudad de Xalapa, teniendo incluso que solicitar apoyo a personas altruistas para conseguir el recurso con el que viajarían únicamente el pequeño Tadeo junto con su madre para una cirugía que resultó exitosa, sin embargo, el precedente de la pésima atención queda evidenciado.
Hizo un enérgico llamado a las nuevas autoridades sanitarias para que tomen cartas en el asunto, pues de lo contrario las cosas seguirán como siempre con miles de quejas de usuarios por la deficiencia e ineptitud con la que algunos colaboradores realizan sus tareas.
“Ojalá brinden un mejor servicio o quiten a las personas que atienden de esa manera, ya que no tienen nada que hacer ahí, si no van a hacer su trabajo, pues que Dios lo bendiga y que se vayan, para qué quieren ese título, para qué quieren estar ahí, o sea, creo que el doctor que debió atendernos está en otra clínica, y en vez de hacer un buen servicio en un solo lugar, está dejando en el peor de los desamparos a más gente de la que pudiese atender”.
Finalmente refirió que este no es un caso aislado, ya que dentro de esas cuantas horas de espera, escuchó de viva voz muchas más historias de desatención e incluso negligencia en una sola noche, lo que podría en breve destapar un enojo colectivo que pudiese desencadenar otras situaciones como manifestaciones o protestas si no se frena a tiempo esta cuestión.
