* Pronto comenzará el calvario de pacientes y plantilla laboral si no se actúa, afirman
Miguel Bautista
A decir de trabajadores y personal del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) muy pronto se iniciará la llamada universalidad de salud, cuestión que vendrá a fracturar la parte laboral de este instituto del sector salud y los beneficios de los que aún goza la derechohabiencia, por lo que ya se han visto iniciadas las luchas contra la privatización de este sector, confirman.
Los entrevistados quienes nuevamente piden el anonimato por temor a represalias con la parte sindical de esta clínica afirmaron que la universalidad de salud es un hecho casi confirmado y que faltaría muy poco para empezar a sentir sus efectos, tales como ya se han visto algunos de manera paulatina, refiriéndose a estos como la falta de medicamentos, retiro de algunos servicios, e incluso bajas de derechohabiencia con cualquier excusa o pretexto, principalmente a aquellos que padecen enfermedades que requieren de tratamiento médico especializado.
Acusó que debido a la falta de información pero también por apatía mucha de la sociedad mexicana está volteando su mirada, e incluso existe indiferencia ante esta reforma, sin embargo, la guerra mediática ha funcionado muy bien para desacreditar al instituto e imponer mediante una simulación dicha reforma al sector poblacional.
Explicaron que al ser una institución tripartita (es decir que la sostienen tres entes sociales) y que su sostenimiento saldría precisamente del gobierno federal, el sector o ramo empresarial y por último la derechohabiencia o clase obrera, por lo que según sus cálculos en México dicho organismo de salud atiende a casi la mitad de la población mexicana, es decir aproximadamente unos 60 millones de personas.
Externaron que aunque mucho se hable de los trabajadores o las quejas que surgen en dicho organismo, lo cual advierte pretende desvirtuar la seguridad social, esto como garantía constitucional del pueblo mexicano, por lo que dijeron no están en contra de que se homologuen servicios o hagan un solo sector salud, sin embargo, acusan que no es esa la intención, sino más bien que el sector privado se adentre en la aplicación de servicios.
Ejemplificaron que la mera intención del gobierno es que se haga un estilo de aseguradoras o aseguranzas como en el vecino país del norte, al igual que en otros países europeos, pero tachan de incongruente esta decisión, puesto que la mayoría de los mexicanos sobrevive con bajos salarios y no alcanzará a costear sus enfermedades.
Cifraron en aproximadamente 410 mil trabajadores activos dentro del Seguro Social, pero no solo estos podrían salir afectados, sino que también la afectación a otros rubros como lo son el despido de médicos especialistas incluso perder el derecho a la seguridad social, no tener derecho a una jubilación, eliminación de categorías y solamente ocupar plazas temporales o contratos que no otorgaran ninguna clase de beneficio.
Opinaron que lo que están viviendo actualmente la mayoría de clínicas u hospitales son el desmantelamiento total de las instalaciones y equipos, con carencias de todo tipo, igual que en la Clínica 28, siendo esta una estrategia planeada para empezar a imponer mediante la reforma de salud que plantea la universalidad de servicios, aunque cuestionaron dichas reformas por el simple hecho de carecer de lo más básico en cuanto a medicinas se refiere, tales como paracetamol, jeringas, agujas, gasas y demás.
Por último, dijeron que estos mismos empleados ya están siendo muchas veces agredidos por parte de la derechohabiencia por estos conceptos impuestos mediante los medios masivos de comunicación, acusando que los líderes nacionales han entregado el contrato colectivo de trabajo de los empleados del IMSS y que al igual que en otros estados se estará sumando a la lucha de sus derechos sindicales para proteger también a la ciudadanía, incluso y cuando ésta se encuentre desinformada y desidiosa ante tal atropello, concluyeron.
SE SUMAN MÁS SECTORES
Con respecto a la marcha de este próximo 31 de julio en nuestro municipio, apoyando a la marca nacional programada por trabajadores de todos los estados, personal sindicalizado de la Clínica 28 confirmaron su asistencia a la ciudad de México, mientras que otros menos afortunados para costear su viaje hasta este destino integrarían el grueso de contingente que ha convocado el movimiento de resistencia magisterial y al cual también se suma la del sector transportista, por lo cual ya se espera un mínimo de 200 personas en dicha marcha, aseguran.
De esta forma, confesaron que ha tenido que cambiar ligeramente la logística del movimiento, pues inicialmente se tendría programado iniciar en el monumento al maestro y con un recorrido a pie terminar en la Clínica 28 del IMSS en nuestra ciudad, por lo que ahora al sumarse otro contingente más se desquiciaría aún más el tráfico de la ciudad, insistiendo en que al no quererse afectar a terceros, la nueva ruta estaría trazada para iniciarse en la Clínica 28 del IMSS y culminar en el parque José María Mata del centro de la ciudad para concluir con un mitin informativo a toda la sociedad en general en dicha plaza cívica, confirmaron.
De esa manera se estaría en contra de varios rubros en los que se ha generado el descontento colectivo, sumando su propia discrepancia a otras como la defensa de la educación pública, la negativa de la evaluación docente y la reforma educativa que sostiene parte del magisterio disidente, mientras que por su parte el gremio taxista de diferentes organizaciones obedecerían la invitación para mostrar su rechazo al nuevo reglamento de tránsito y seguridad vial que se pretende aplicar a partir del próximo mes de agosto.
DATOS ADICIONALES
Los datos vertidos en este documento han sido proporcionados por personal del Instituto Mexicano del Seguro Social, donde según su versión se estarían violando diversos artículos de su contrato colectivo y atropellando sus derechos laborales, insertándolo íntegramente para que las personas puedan formarse una opinión al respecto.
Este perverso Convenio, el cual integra la Cláusula 12 bis., y el Estatuto “A” mutila nueve cláusulas del CCT: la 2, 4, 5, 11, 12, 13, 14, 131, 133, y tres transitorias del CCT, la 4a. 30a. y 31a; acaba además con el Reglamento de Confianzas “B” al aplastar sus dos artículos iniciales, el 1 y 2; mutila también el Reglamento Interior de Trabajo en sus artículos 1, 2, 4, y el artículo 63, en Derechos de los Trabajadores, fracciones XXXII, XLIV, XLV, y al artículo 64 de Obligaciones, fracción VI; también desaparece la Comisión de Jubilaciones y Pensiones, artículo 28 del Régimen de Jubilaciones y Pensiones; desaparece el Reglamento para la Transformación de Plazas de Nivel 34 de médico general a categoría de médicos autónomos.
Todas estas mutilaciones provocadas por este convenio dan como resultado, la renuncia firmada por el sindicato al Contrato Colectivo de Trabajo (CCT), porque al pasar las confianzas “A” y “B” al Estatuto “A” estos trabajadores pierden todos sus derechos del CCT y sus nuevas condiciones laborales se regirán por el apartado “B” de la Constitución con Condiciones Generales de Trabajo, lo cual significa que no tardarán en incorporar a todos los trabajadores de base del IMSS, porque si no se hace así no podrá entrar en funciones el sistema universal de salud. Lo que realmente firmó el sindicato fue la pérdida de todos nuestros derechos contractuales para que pueda entrar el proyecto universalista de salud.
Segundo: Acaban con la carrera institucional de todos los trabajadores de base (confianzas “B”) y terminan con el RJP, porque los trabajadores de confianza “A” y “B” representan 60 mil plazas de cotizantes, si a esto le agregamos que ya se acabaron la Subcuenta 1 y van sobre la subcuenta 2 del Fondo de Jubilaciones es cuestión de tiempo que muy pronto anuncien que ya no habrá para pago de jubilaciones y pensiones de los trabajadores del IMSS. Y peor porque esta cláusula 12 bis – Estatuto “A”, acaba con el CCT y con la Comisión Nacional de Jubilaciones y Pensiones, artículo 28 del reglamento del RJP. Y no habrá quien se responsabilice del pago.