*Ni el Gobierno del Estado ni el municipal frenan la creación de asentamientos irregulares; tampoco promueven plantas de tratamiento * Existen de cinco a siete colonias irregulares y sin cumplir con la norma requerida
Amatlán
(AVC)
El municipio no sólo mantiene su problemática en materia ambiental por la creación de un basurero a cielo abierto, sino que además hay entre cinco y siete colonias establecidas sin la normatividad requerida, mismas que ocasionan la contaminación constante de mantos freáticos al verter sus aguas negras directamente a los arroyos y ríos.
Los afluentes Quimiapa y Tepletapa son algunos de los más afectados; sin embargo, ni las autoridades municipales ni estatales han decidido hacer algo para impedir que esto se agrave.
Integrantes del movimiento ambientalista que desde hace más de 40 días se manifestaron en contra de la creación de un basurero a cielo abierto —y desde hace 15 días mantiene tomadas las instalaciones del Palacio Municipal—, aseguraron que la gota que derramó el vaso fue el pretender convertir un terreno destinado para un área deportiva en un tiradero a cielo abierto; con lo que cerca de mil 500 habitantes que rodean la zona en Quimiapa exponen su salud, ante la contaminación que existe.
“Cada vez hay más contaminación aquí en Amatlán; era una zona libre de eso antes, con los arroyos y ríos limpios para poder bañarse en ellos sin ningún problema; al paso de los años los drenajes de aguas negras que desembocan en ellos, por colonias que han surgido sin ningún reparo, están terminando con el agua limpia; es importante que las autoridades tomen acciones, porque ahorita con lo del basurero a cielo abierto también nos vino a pegar”, explicó Víctor Felipe Vázquez Méndez, integrante del comité Por un Veracruz Limpio AC.
El entrevistado dijo que también temen por la proliferación del mosco Aedes Aegypti, que provoca el dengue, pues desde que el Ayuntamiento inició a llevar la basura al terreno en Quimiapa, los vecinos han mostrado signos de enfermedades gastrointestinales, en la piel y casos de dengue, los cuales han sido controlados por la intervención médica desde los centros de salud; sin embargo, el tiradero representa ya un foco de infección.
Vázquez Méndez condenó la creación del tiradero a cielo abierto como una acción arbitraria del munícipe, pues depositó cerca de 70 toneladas de basura sin contar con información o una consulta ciudadana sobre el tratamiento de los residuos sólidos que se llevaría a cabo.
“El proyecto no cuenta con una manifestación de impacto ambiental, más bien se trata de un tiradero a cielo abierto que contradice a la Ley Estatal de Protección Ambiental, por eso aquí seguiremos protestando hasta que nos quieran atender, pero hasta el momento no ha habido ningún acercamiento del Gobierno estatal, de quién hemos pedido ya su intervención”, agregó.
Mientras tanto en Amatlán continúa la toma de instalaciones del Palacio Municipal por parte de los grupos ambientalistas, sin que la Secretaría de Gobierno intervenga, cuando desde hace una semana solicitaron que tomara en cuenta la solicitud para mediar la problemática que tienen, pues dijeron tener claro que el diálogo directo con el alcalde ya no existe.
