* En todo caso, sería conveniente preparar el camino para una elección en la que surja un nuevo dirigente
Facundo Bartolo Salazar
Al tomar en cuenta que el próximo mes de diciembre, el presidente de la Asociación Agrícola Local de Productores de Cítricos, Nicolás Murrieta Espinoza cumplirá dos años en que ya debería haber dejado ese cargo, resulta necesario pedir cuentas a ese dirigente, sobre todo en lo que se refiere a recursos económicos que se han bajado para supuesto apoyo a productores, opinó Bertoldo Zamítez Mendoza, integrante de la Unión de Ejidos.
El entrevistado manifestó que “los productores deberían unirse de una vez por todas para pedir a Nicolás Murrieta que rinda un informe detallado de las gestiones y demás actividades que ha realizado al frente de la Asociación, pues eso sería lo correcto, sobre todo cuando sabemos que cada día tiene más puestos y se necesita conocer realmente su desempeño, o de otra manera debería dejar libre el paso a otra persona para que sea el nuevo dirigente de los citricultores”.
Zamítez Mendoza consideró que hay tiempo de sobra para que en los meses venideros, los productores comiencen a hacer escuchar sus voces, mostrando decisión para que en su caso sea elegido un nuevo presidente de la Asociación Agrícola Local de Productores de Cítricos, pues comentó que esa organización no debería permanecer estancada, sino que debe continuar representando los intereses y las necesidades de los citricultores, mismos que requieren hasta de lo más elemental para trabajar sus huertas.
Insistió en que se debe determinar el papel que realmente está representando Nicolás Murrieta Espinoza al frente del citado gremio, pues de lo contrario, sería conveniente plantear una nueva elección de la que surja una persona con capacidad y con el carisma necesarios para aglutinar a sus compañeros, de tal manera que se abra la posibilidad de dar un giro a la actividad y darle nuevos bríos para beneficio de los agremiados.
Expresó que no es justo que Murrieta Espinoza siga acaparando puestos, sin que realmente brinde respuesta a los productores de las actividades que lleva a cabo en su beneficio, siendo ese el caso de la Juguera del Totonacapan, la cual seguramente terminará siendo un “elefante blanco”, pese a que se había dicho que sería propiedad de los productores. Lamentó que ese proyecto quede sepultado, independientemente de que haya muchos millones en juego, desconociéndose en manos de quiénes terminaron esos recursos que eran para todos los productores de la región.