- Comerciantes y negocios de comida creen que pueda afectarles dicha disposición
Miguel Bautista
Martínez de la Torre, Ver.- A unos días de que entre en vigor la resolución del IVA a alimentos y/o comida rápida, las dudas han empezado a surgir en los pequeños contribuyentes, pues consideran que también resultarán afectados todos aquellos que expidan de manera informal algún alimento preparado, sin embargo, solo pagará 16% de IVA la comida rápida que se venda en cadenas de autoservicio o de conveniencia, los productos que se encuentren en los refrigeradores o área de comida rápida.
La disposición según se lee, incluyó sándwiches, tortas o lonches, incluidas chapatas, pepitos, baguettes, croissants, incluidos cuernitos; bakes, empanadas o volovanes; pizza, incluidas las focaccias; guisos y discadas, hot dogs y banderillas. La regulación también incluyó hot cakes, alitas, molletes, hamburguesas, bocadillos (snacks), sushi, tamales, sopas instantáneas y nachos, entre otros.
Incluso algunos negocios de comida han empezado a alzar la voz opinando que sus insumos podrían incrementar (lo que no resultaría de todo descabellado), e incluso que ahora los pequeños negocios dedicados a ese rubro tendrían que pagar más impuestos de los que ya se les impone, por lo que no quedaba del todo claro quién o quiénes sufrirían por dicha legislación, pues consideran que la misma es poco clara y dejaría mucho a la interpretación al ponerla en práctica.
Según comentarios de especialistas en el tema, el contador Jaime Parada refirió que las grandes cadenas comerciales si estarían sujetas a dicha disposición, aunque por un monto mínimo en los primeros días de entrada en vigor y aumento paulatino de acuerdo a las tarifas que emitan los organismos fiscalizadores.
Así mismo, la mayoría de esos alimentos ya preparados se encuentran en refrigeradores o contenedores especiales de las áreas de comida rápida en las llamadas tiendas de conveniencia o de cercanía, minisúper, tiendas de autoservicio, y en general en cualquier establecimiento en los que se vendan al público en general esos productos.
“Con esto del IVA lo más seguro es que no les estaban cargando la mano a las grandes cadenas comerciales, por lo que seguramente esos productos que hoy consumimos normalmente suban de precio y quienes lo resientan serán los consumidores”.
Por su parte, Clotilde Meléndez, vendedora de comida en un negocio particular reconoció que los productos de la canasta básica o aquellos proveedores a quienes ellos compraban sus productos pudiesen subir abruptamente sus precios, incluso los productores que se dedican a esta actividad, por lo que sería un duro golpe a quienes sobreviven de este rubro, desconociendo de fondo sus normativas en cuanto a dicha legislación.
Además, expuso que de concretarse se daría un flagelo más a los micronegocios, considerando que tendrá un impacto negativo en las ventas que realizan, aunado al casi seguro alza en insumos, lo que podría dar al traste con mucho locales que apenas sobreviven de esta actividad y que ven en esto una fuente de empleo que podría terminarse.