Santiago García
El Partido Acción Nacional se resquebraja por la lucha entre dos grupos que buscan adueñarse del Comité Directivo Estatal, lo cual complica un proceso electoral en el que difícilmente obtendrán resultados positivos, pues las imposiciones de candidatos ha ocasionado que su propia militancia le haya dado la espalda.
Candidatos que nadie conoce, hermanos o compadres de caciques, y algunos hasta involucrados en denuncias penales fueron los hombres y mujeres que el PAN en Veracruz decidió que fueran sus representantes en las próximas elecciones.
Incluso el mismo, dirigente estatal José Mancha ha reconocido que no ganarán más allá de 7 de los 21 distritos que se disputan en Veracruz, pero algunos pronósticos, estiman que con suerte pudiera ganar 3 o 4 distritos. Por esta situación, algunos candidatos ya tiraron la toalla, como fue el caso de los distritos de Poza Rica y Minatitlán, donde tuvieron que encontrar a dos mujeres que entraron de emergentes a competir en la elección.
Una de las características de la mayoría de los candidatos panistas han sido señalados o incluso se encuentran denunciados por distintas circunstancias, en su mayoría con el desvío de recursos públicos.
Los denunciados
Tal es el caso del candidato de Pánuco, Iván Villegas Arévalo, exalcalde de Ozuluama, quien aún no logra solventar las observaciones de la cuenta pública 2011 y 2012 ante el Órgano de Fiscalización Superior por un monto cercano a los 20 millones de pesos.
En Tantoyuca, tierra dominada por el cacique Joaquín Guzmán Avilés, logró imponer a su candidato Víctor Marín del Ángel, quien aparece posando en algunas fotografías con una pistola, además de tener fama de proteger a una banda dedicada al robo de ganado en el norte del estado.
Roberto Cortés, candidato panista por el distrito de Tuxpan, pesa sobre él una denuncia ante la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales de la PGR, pues durante las elecciones de 2013, como coordinador del programa 70 y Más de la Sedesol en el municipio de Álamo, condicionó los apoyos únicamente a quienes demostraran simpatizar con los candidatos del PAN.
Por esta razón se interpuso una denuncia en su contra, la cual no ha causado estado, pues la PGR la mantiene todavía en integración.
Alba Leonila Méndez, candidata por el distrito de Martínez de la Torre busca repetir nuevamente el cargo de diputada federal, además que ya ha sido alcaldesa de Atzalan en dos ocasiones, con observaciones por desvíos de recursos en las cuentas públicas 2007 y 2008 por parte del Orfis, por un monto de casi 35 millones de pesos.
Hasta hace unos meses, se desempeñaba como secretaria del ayuntamiento de Teziutlán, en el estado de Puebla, y de acuerdo con dirigentes municipales del PRD y del PRI del municipio poblano, personal y recursos de dicho ayuntamiento son utilizados a favor de Alba Leonila Méndez.
Otro candidato implicado en desvío de recursos y con una denuncia en su contra por haber golpeado a su esposa, es el candidato de Xalapa Rural y exalcalde de Emiliano Zapata, Adrián Vázquez.
Durante su gestión, incluso funcionarios de su administración tuvieron que advertir al Orfis, que se habían desviado 4 millones de pesos del programa de electrificación en zonas rurales.
Quien ya cuenta con una denuncia durante el actual proceso electoral, es la candidata por Huatusco, Patricia Montiel quien ha superado el tope de campaña, gracias a los recursos que le ha conseguido el actual diputado federal por ese distrito Víctor Serralde.
Hace unos días la dirigencia estatal del PVEM presentó una denuncia formal ante el Instituto Nacional Electoral porque la candidata panista violó la Ley General en Materia de Delitos Electorales al utilizar infraestructura urbana del municipio para la colocación de su propaganda, además que tan solo por estos artículos ha superado el tope de campaña.
En Córdoba, Juan Gerardo Perdomo Abella, está señalado por la periodista Ana Lilia Pérez como parte del grupo de amigos del actual diputado federal y exdirector de Pemex Refinación, Juan Bueno Torio de ser quienes la hostigaron cuando escribió un libro y publicaciones sobre el desvío de recursos en la paraestatal.
En el año 2013, la periodista Ana Lilia Pérez escribió el libro “Camisas azules, manos negras” en el que describe irregularidades en varios contratos por parte del exdirector de Pemex Refinación, Juan Bueno Torio para beneficiar empresas de su propiedad o en las que es inversionista.
Este hecho provocó un acoso por parte de Bueno Torio contra la periodista, quien presentó una denuncia por esta situación y entre los nombres de los emisarios del legislador, aparece el hoy candidato por Córdoba, Juan Gerardo Perdomo Abella.
Otro candidato panista con una denuncia durante el actual proceso electoral, es el de Cosamaloapan, Luis Grandvallet, quien presume la amistad del actual alcalde de Tres Valles Marcos Cano Ramo, al grado de utilizar vehículos oficiales de ese ayuntamiento para recorridos de su campaña.
Medios de comunicación de la cuenca documentaron, que el pasado 30 de abril, el candidato panista llegó junto con su comitiva en una camioneta roja Mitsubishi, a la cual le retiraron las placas, pero tenía rotulado el logotipo del ayuntamiento de Tres Valles, junto con otros tres carros más en las mismas condiciones.
Derivado de esto, en la Junta Distrital de Cosamaloapan, se presentó la denuncia formal en contra tanto del candidato como del alcalde panista de Tres Valles.
Los del “dedazo”
Una clara muestra de la imposición de candidatos, es el caso del distrito de Veracruz Rural, donde Miguel Ángel Yunes Linares ordenó que el abanderado fuera el expresidente municipal Francisco Gutiérrez de Velasco, quien tuvo una de las administraciones donde menor cantidad de obra pública se realizó.
Por el contrario, lo que sí es recordado de la administración municipal es la desaparición de 5 millones de pesos del Fideicomiso para la construcción del tren ligero que iba a comunicar a Boca del Río con el municipio de Veracruz. De igual forma, haber gastado 2.5 millones de pesos para construir una estatua al expresidente Vicente Fox Quesada e incluso rebautizando el bulevar Miguel Alemán Valdés, por el del oriundo de Guanajuato.
Un claro ejemplo de nepotismo, es el del diputado local Domingo Bahena Corbalá, quien impuso a su hermana Liliana Bahena como candidata por el distrito de Cosoleacaque, incluso la semana pasada el dirigente del comité municipal del PAN en Cosoleacaque, Héctor Casas Aguilar anunció su renuncia por este “dedazo” y advirtió que lo mismo harían militantes y directivos en Texistepec y Jáltipan.
En Orizaba, uno de los hombres más ricos de Veracruz y exalcalde Juan Manuel Diez Franco impuso como candidato a Daniel Zairick, quien no cuenta con trayectoria política, ni empresarial y su único mérito es haber sido su chofer.
Quien no fue impuesta, sino autoimpuesta, es la candidata por el distrito de San Andrés Tuxtla, María Elena Cadena Bustamante, quien ni siquiera se esperaba que ganara la elección interna del PAN en su proceso.
Incluso aparecía en el tercer lugar entre las preferencias de los panistas, pero el día de la elección interna celebrada el 26 de febrero, se suscitaron hechos de violencia como el robo de las urnas y de los cuatro centros de votación que se abrieron ese día en Ángel R. Cabada, San Andrés Tuxtla, Catemaco y Santiago Tuxtla, únicamente apareció la paquetería del último, donde ella salía ganadora.
Los demás candidatos acusaron a Elena Cadena de haber utilizado grupos violentos para quedarse con la candidatura, pero al final no procedieron contra ella por temor.
Los grises
Dentro de los candidatos del Partido Acción Nacional para las próximas elecciones hay algunos que no fueron impuestos, aparentemente no están relacionados en hechos delictivos, pero no cuentan con trayectoria política, arraigo en su zona y en general no han logrado convencer al electorado de votar por ellos, porque ni siquiera los conocen.
El caso más evidente se da en Poza Rica, donde Chantal Barajas tiró la toalla y abandonó la contienda electoral el pasado 8 de abril, a 30 días de celebrarse las elecciones, y su lugar fue ocupado por Yhereiri Carranza, una joven, quien en sus primeras declaraciones admitió no saber nada de política.
Algo similar ocurrió en Minatitlán con Claudia Aguilar Molina, quien fue designada candidata apenas un día antes de empezar las campañas, porque nadie se interesaba en competir por considerar que no hay forma de que el PAN gane en ese distrito.
En este caso, ya van dos mujeres que renuncian a ser las candidatas suplentes, por lo que actualmente el Comité Directivo Estatal está en busca de alguien que quiera acompañarla en la fórmula para competir en las elecciones.
En Acayucan, el PAN designó como candidata a Sofía Mariño, un par de días de iniciadas las campañas electorales, pues ella misma reconoció que no quería participar porque no veía muchas posibilidades de ganar en ese distrito.
En Zongolica, región donde el Partido Acción Nacional ha obtenido altas votaciones al desarrollar cuadros directivos y ha hecho crecer su militancia, se presentó una gran inconformidad, porque nominaron a Dulce María Tzopelik, cuya única relación con esa zona es que su papá nació en el municipio de Tlaquilpa, sin embargo ella desde que nació y vivió en Orizaba y posteriormente se fue a radicar al Distrito Federal y ahora pide el voto en un distrito donde no conoce a nadie y donde nadie la conoce.
Quien ha sido criticada hasta por sus propios compañeros de partido, es la candidata de Veracruz Urbano, Gabriela Ramírez, pues apenas hace tres años, Rafael Acosta Croda ganó ese distrito para el PAN, y ahora él mismo ha advertido la derrota.
Junto a él, otros militantes del PAN han decidido ya no hacer campaña, pues consideran que la postulación de Gabriela Ramírez fue un error.
En el distrito de Xalapa Urbano se encuentra Ulises Chama, quien en sus conferencias de prensa siempre muestra resultados de encuestas de opinión, pero nunca da a conocer el nombre de la empresa que las realizó, donde asegura estar a la par de la candidata priísta Elizabeth Morales e incluso por arriba de ella en las preferencias electorales.
La única ocasión en que ha logrado aparecer con fuerza en los medios de comunicación, fue cuando una camioneta de su equipo de campaña provocó un accidente vial atropellando a una persona, a la que no le querían pagar los daños ocasionados.
Oriundo del municipio de Espinal, Ramón Saiz Calleja es el candidato panista por el distrito de Papantla, conocido por tener una empresa de cítricos en la sierra y por ser uno de los opositores a la utilización del túmin, moneda local entre los indígenas papantecos, como una forma de promover su raquítica economía.
El distrito de Coatepec, fue considerado un bastión del panismo hasta hace unos años, pero con la designación de malos candidatos la votación ha ido disminuyendo en esta zona, para esta elección, la designación de Ethel González no cambiará la situación, pues a decir del dirigente municipal del PAN, Martín Monge les falló la selección del abanderado.
Por último se encuentra Gloria Santos Navarro, candidata por el distrito de Coatzacoalcos, quien tampoco tenía relación con la política, pues era directora Casa Amor que da atención a enfermos con cáncer y que su única propuesta es que haya más recursos para el rubro de salud.