Explicó que al ir a recogerlo el papá, lo encontró amarrado a una silla con un trapo grueso, segregado del resto de los infantes, quienes se encontraban disfrutando sus actividades recreativas y de educación, por lo que ya están realizando la investigación pertinente. Añadió que no es la primera vez que ha habido casos de abusos en las guarderías locales, pues en otras ocasiones se ha sabido de pequeñitos a los que han maltratado física y verbalmente.