* Son los empacadores quienes han demeritado la calidad al introducir producto foráneo
Facundo Bartolo Salazar
Los pequeños productores de limón persa no serían beneficiados con la pretendida certificación de origen de esa fruta, pues si bien es cierto ellos tienen la capacidad de producir con la calidad que ha dado renombre a Martínez de la Torre y la región, son los empacadores quienes demeritan ese prestigio alcanzado al introducir producto de Tabasco, Campeche, e incluso de Guatemala y Belice, para ser empacado y exportado como originario de esta región, señaló Bertoldo Zamítez Mendoza, delegado de citricultores de Puntilla Aldama.
Comentó que “ahora son los grandes empacadores quienes buscarán la certificación de origen, después al introducir limón persa de otros estados y otros países, no solamente han mermado la calidad de la fruta originaria de Martínez de la Torre, sino que han afectado en gran medida a los pequeños productores, pues con esas acciones han provocado que los precios se desplomen, atentando ello contra la economía de miles de familias”.
Reconoció, no obstante, que si sería positiva la certificación del limón persa, aunque insistió en que los pequeños productores serían beneficiados con esa medida si los empacadores respetan la calidad de la fruta producida en la región, evitando introducir ellos mismos producto foráneo que definitivamente demerita la calidad que se obtiene localmente. Consideró que debe haber mecanismos para que con esas acciones que se emprenden sean beneficiados más integrantes de la cadena productiva, promoviendo el desarrollo de Martínez de la Torre y la región.
Contempló la posibilidad de que con la certificación de origen del limón persa puedan ser regulados los precios de la fruta, pues hasta el momento, los productores han estado expuestos a los vaivenes del mercado, sin contar con argumentos para pelear una mejor cotización. Añadió que “es urgente buscar la forma de que los productores en general tengan mejores ingresos, pues hasta el momento se encuentran en una situación desesperada, sabiendo que sus ingresos ya ni siquiera les permiten trabajar adecuadamente sus huertas”.
“Ahora son los grandes empacadores quienes buscarán la certificación de origen, después de que al introducir limón persa de otros estados y otros países, no solamente han mermado la calidad de la fruta originaria de Martínez de la Torre, sino que han afectado en gran medida a los pequeños productores”.
Bertoldo Zamítez Mendoza
