Hace algunos meses en este alejado sector habitacional, ya se han registrado varios casos de dengue clásico y algunos hemorrágicos, derivados según los vecinos, por el almacenamiento de agua y la espesa maleza que se observa en predios baldíos.
Puntualmente los colonos han hecho un llamado a las autoridades comisionadas en el rubro; sin embargo, hasta el momento no han recibido respuesta alguna al clamor de ayuda, que con el tiradero de llantas detectado esta semana, agudiza la proliferación de moscos y animales de rapiña.
Aunque algunos de los vecinos negaron que la colonia se haya convertido en un tiradero, otros afirmaron que muchas personas e incluso empresas, acuden al lugar a deshacerse de ese material.
“Hay muchos tiraderos de llantas y de escombro, tendríamos que dejar a alguien de planta para sorprender a los ciudadanos que hacen mala disposición de sus desperdicios”, indicaron los afectados.
Por el momento los quejosos reportan algunos casos de cuadros febriles, y aunque al parecer no se trata de dengue, no descartan que con la presencia de criaderos de mosquitos, pudieran generarse brotes de la enfermedad.