* Modificaciones a la ley general de salud pondría en riesgo la profesión médica
* Como siempre, los más afectados serían los usuarios ante posibles éxodos
Miguel Bautista
Como balde de agua fría ha caído en el gremio médico la modificación de los artículos 81 y 272 de la ley general de salud, donde se prevé que sea el Comité Normativo Nacional de Consejo de Especialidades Médicas (CONACEM), quien funge como una asociación civil para que regule la certificación médica por encima de la especialidad que se tenga, poniéndola por encima de autoridades institucionales como la SEP o la propia SSA.
Ahí no acaba la cuestión, pues la gravedad del asunto se adivina cuando al no aprobarse el examen de consejo se perderá el derecho a ejercer, siendo esto inconstitucional, pues la certificación deberá ser voluntaria, obteniéndose título y cédula por universidades educativas y aprobar dichos exámenes estaría sujeto a particulares que representarían un alto costo incluso violando los derechos de todo este sector de la salud.
Martha Patricia Palacios Zurita, presidenta del Colegio de Médicos en Martínez de la Torre explicó que el proceso de certificaciones ya se ha manejado anteriormente pero por organismo ligados al gremio como la (Comisión Nacional de Médicos –CONAMED-) y en el estado bajo la tutela del Consejo Estatal de Médicos Generales.
En este tenor externó que existe otro organismo que es la Asociación Internacional de la Defensa de los Derechos Humanos de los Médicos (AIDEM), quien denunció que los nuevos lineamientos de la Ley General de Salud monopoliza la certificación de los médicos a una sola empresa que no tiene afiliación a la Dirección General de Profesiones ni a la Secretaría de Salud, promulgándose en contra de estas evaluaciones por poner en riesgo el trabajo médico y están promoviendo amparos ante dicha legislación, ya sean estos colectivos o individuales, pues se advierte que quien no esté regulado por el organismo antes mencionado caerá en el marco de la ilegalidad, por lo que las prácticas podrían ser fuertemente sancionadas.
Esta cuestión viene maquilándose desde el 2011, sin embargo se promulgó apenas este 25 de marzo, según su perspectiva con intenciones dolosas, pues sería en época vacacional cuando salió a la luz pública y pocos o casi ninguno pudiese haberse enterado de estas intenciones que tienen como fecha límite el 14 de abril, e incluso hasta el día de hoy en la página de la Ley General de Salud no aparecían estas modificaciones por aparecer el link como ‘en mantenimiento’ por parte del servidor.
Confirmó que quienes más sentirían los efectos de estas modificaciones sería la población usuaria al reducir aún más el número de médicos que pudiesen aprobar estos exámenes, e incluso con el déficit de atención en las instituciones públicas, o cuando se requiera a los médicos privados pero estos también sufrirían este tipo de limitantes.
Cuestionó duramente dicha decisión al no contar dicha comisión con personas ligadas al sector salud, por lo cual se tendría la duda de qué se pudiese preguntar en las evaluaciones o cual sería el banco de preguntas que se harían durante la misma, además del pago de honorarios que esto costaría.
Aseguró que mediante el Colegio de Médicos de Martínez de la Torre se buscará integrar a los organismos de defensa de los derechos de los médicos, exhortando a los colegas de profesión que tengan estas dudas para poder resolverlas y poder entrar como organismo colectivo para promover dicho amparo ante las instancias correspondientes.
Si los médicos previamente certificados por las respectivas instituciones donde se formaron, no aprueban el examen de la CONACEM, estos no podrán ejercer más, violando así sus derechos como profesionistas. Ya que se verán obligados a someterse a una certificación de un organismo no transparente ni regulado por la ley, por su naturaleza como organización civil.
El plazo para la nueva certificación es hasta el 14 de abril, es decir ni un mes después de modificados los artículos de la Ley General de Salud, no importando los altos costos de la certificación ni los procedimientos, que por cierto no han quedado claros a más de una semana de publicados. Los médicos denuncian que las medidas promovidas por decreto no han sido difundidas de la mejor manera, por lo que muchos de sus compañeros de profesión aún no están enterados, más aún, al no haber normatividad que regule el procedimiento de certificación que usará la CONACEM del que tampoco existe información, todos los médicos corren el riesgo de ser reprobados.