* Implica altos costos y solamente serviría para lugares donde no hay red eléctrica como desiertos y montañas
Facundo Bartolo Salazar
El uso de la energía solar para generar electricidad no beneficia a los usuarios de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en general, pues esa alternativa sigue siendo de alto costo y definitivamente solo serviría donde no hay redes eléctricas, como en los desiertos y montañas, pero no en las zonas urbanas, donde no resultaría rentable, salvo tratándose de empresarios, quienes tengan la capacidad de invertir en paneles solares para reducir sus costos en energía a largo plazo e incluso producir electricidad para venderla a la paraestatal, expuso Federico Pérez Gómez, vocal del Consejo Ciudadano de la CFE.
Informó que pese a lo anterior, la CFE sigue presentando ante el citado Consejo a empresarios que vienen a ofertar sus productos, concretamente paneles solares para generar energía fotovoltaica y convertirla en electricidad. Comentó que esa alternativa tiene 35 o 40 años en el mercado, pero no la han podido “aterrizar” realmente con los consumidores. Comentó que sería muy difícil que alguna empresa ofrezca precios competitivos de tales equipos de generación de energía para que sea rentable la opción en un momento dado.
Mencionó, no obstante, que ”tú puedes invertir unos 200 mil o 500 mil pesos para resolver el problema de tu casa, y quizá de 3 a 5 millones para tu negocio, con la opción de producir para ti, y en su caso para vender a la CFE los sobrantes”. Indicó que, definitivamente, quien tenga la capacidad de invertir para convertirse en proveedor de energía eléctrica, tal como ya lo permite la ley, lo cual haría esa inversión perfectamente recuperable.
Destacó que ese es el esquema que busca implementar la CFE en empresas con alto consumo de electricidad, cuyos recibos van de los 10 a 15 mil pesos, por lo cual sería rentable invertir en equipos de generación de energía, pues ese proceso les reduciría su gasto a 200 o 300 pesos. Insistió en que esto beneficiaría a los empresarios, pero no al público en general.
Pérez Gómez explicó entonces que los usuarios comunes y corrientes de la CFE, simplemente pueden tomar como opción ahorrar energía eléctrica, cambiando los focos incandescentes por lámparas ahorradoras, o bien las lámparas con diodos emisores de luz (LED), que son las más modernas en el mercado actual. Afirmó que esos procedimientos permiten pagar lo mismo a la CFE, y además gastar menos energía.
Indicó que por ejemplo diez focos de 100 watts consumen un kilowatt cada uno, cuyo costo es de 3.70 pesos, pero con las lámparas de 20 watts se pueden iluminar 5 áreas con los mismos 100 watts, o bien las mismas 10 áreas con 10 focos de 20 watts. Expresó que con ello es posible consumir menos energía en iluminación, un ahorro que se puede extender a otros rubros como el de climas y otras necesidades de los hogares.